Una propuesta indecente
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Mi novio hace mucho tiempo quería que yo tuviera sexo con otro hombre, para él esto era hacer una fantasía sexual realidad y como yo amo demasiado a mi novio y como soy una mujer sumamente caliente no me opuse para nada a hacer su fantasía realidad.
La noche del miércoles mi novio y yo después de una tremenda follada, nos pusimos a hablar de sexo que es nuestro tema preferido, él me preguntó que cuándo iba a contarle la historia de haber follado con otro hombre y yo le dije que muy pronto, pero que mi condición era que él no me preguntara el nombre del muchacho con quien pensaba follar. Él accedió a mi condición, pero con la condición de que fuera antes del viernes, y yo le dije que estaba bien; lo que mi novio no se imaginaba era que la noche siguiente yo haría su fantasía realidad.
El jueves muy temprano mi novio me llamó y fue aquí donde le di la noticia que necesitaba que fuera a comprar unos condones para mí porque esa noche yo iba a hacer esa fantasía realidad. A los pocos minutos llegó a mi casa con los condones y me dijo:
– No sólo vine a traerte los condones, sino que vine a follarte ya que como hoy vas a follarte a otro hombre no quiero que mientras eso suceda te olvides de mí.
Yo solo sonreí y me dispuse a tener una excelente sesión sexual con mi novio en la cual yo le chupé mucho la verga ya que esto es algo que nos encanta a los dos y bueno en fin hicimos de todo en cuanto a sexo se refiere.
Llegó la tarde y me fuí a la universidad, en este lugar era donde mi amante de esa noche me iba a ir a buscar. Se hizo la hora y él llegó a buscarme, llamé a mi novio como habíamos acordado y me monté en el coche. Él muy galantemente me dio un beso en la mejilla y unos bombones. Realmente pude ver en su mirada las ansias que tenía por estar conmigo, sus ojitos brillaban de emoción y al mismo tiempo lucía muy intrigado por saber qué era todo lo que sucedería. Me preguntó que si estaba cómoda y a dónde quería ir, a lo cual yo le respondí:
– Yo estoy aquí contigo para tener sexo y por hacerle realidad la fantasía a mi novio y de paso a ti también.
A lo cual él me respondió:
– Es tan obvia mi desesperación por tenerte.
Finalmente decidimos ir a un push botom (o casa de citas) que es muy popular en nuestra ciudad, entramos al cuarto, yo solo pensaba en lo feliz que mi novio estaría por la historia que le iba a contar, pero por un momento dejé eso a un lado y pensé “Ya estoy aquí con mi amante así que tengo que darle una noche exquisita para que jamás se olvide de mí ni de este día”. Él empezó a besarme por todo el cuello, me acariciaba mucho todo el cuerpo y yo a él, luego las cosas se tornaron muy calientes, se sentía un ambiente erótico, un olor a sexo se desprendía de nuestros cuerpos, suavemente al oído mi amante me dijo:
– Dime por donde te gustaría empezar ya que quiero complacerte en todo.
Y yo le dije que a mí me gustaba que me sorprendiera, así que mejor fuera espontáneo e hiciera todo lo que él quisiera conmigo.
Continuamos acariciándonos mucho, poco a poco él fue quitándome la camiseta y pude ver como brillaron sus ojos al ver mis grandes y deliciosas tetas y empezó a acariciarlas mucho, Mmmmmm…!!! Esa fue mi expresión al sentir sus manos en mis tetas. Luego de eso para mi deleite, se las llevó a su boca y me las chupó de una manera increíble y pude sentir como mi coño empezó a mojarse muchísimo. Yo temblaba de placer y él me dijo que jamás había tenido tetas tan ricas como las mías y que estaba muy excitado con tan solo verme. Continuó quitándome el pantalón mientras me chupaba las tetas. Para su sorpresa se encontró un diminuto tanga color rosado fosforescente (que mi novio me había regalado) se detuvo por un momento y me dijo:
– Déjame apreciar el espectáculo de mujer que tengo entre mis brazos ahora mismo. El color rosado te queda muy bonito con el contraste de tu piel.
Yo sonreí y me sentí muy alagada, también me dijo que le encantaba mi cuerpo, el color de mi piel y que el tanga me quedaba excelente, que tenía un culo maravilloso y que estaba ansioso de probarme por completo a lo cual yo respondí:
– No lo pienses más y ven a disfrutar pues!.
Cuando me quito el tanga me miró a los ojos y me dijo que el tatuaje que tengo en mis nalgas me quedaba excelente y le dio un besito de piquito.
Continuando con el cuento le digo que si hay algo que me excita y hace que me moje muchísimo es que me acaricien suavemente todo el cuerpo y él sin que yo se lo dijera nada pudo percibir eso, así que se dispuso a acariciar muy suavemente todo mi cuerpo desde mi cabeza hasta la punta de los pies.
Para entonces ya yo estaba que no podía mas, así que le quité la camiseta, le di un par de besos en el pecho, él me apretaba y me mordía mucho y eso es algo que me encanta ya que soy fanática del sexo salvaje. Parecía como si otras veces hubiéramos estado juntos ya que yo sentía que él sabía todo lo que a mí me gustaba. La cosa estaba cada vez mas y más caliente, yo no podía creer lo bien que lo estaba pasando y lo bien que mi amante se compenetraba conmigo. Así que no aguanté más y le quité el pantalón y no se imaginan con lo que me encontré: Wwwaaaoooo!!! Casi se me salen los ojos al ver la enorme verga que tenía frente a mis ojos. Él pudo darse cuenta de la expresión de mi rostro y lo mucho que me gustó ver el espectáculo de verga que tenía, fue ahí donde me convencí que me lo iba a pasar estupendamente No pude resistir al ver tan honorable verga así que enseguida me la llevé a la boca, la verga de mi amante entró de una forma increíble en mi boca y fue donde pensé “Es aquí donde más me tengo que destacar” y le dije:
– Si quieres podemos hacer todas las poses que quieras porque yo soy muy puta para las poses.
El sonrió y me dijo:
– Vamos a ver que hay de cierto en eso.
Lo primero que hizo fue cargarme entre sus brazos, me llevó contra la pared y me metió toda la verga.
– Oooohhh si dame más – le decía yo y jalaba su cabello, mordía sus hombros y arañaba su espalda, mientras que él empujaba fuerte y me preguntaba si me gustaba su verga.
Para no hacerles el cuento tan largo todo se lo puedo resumir en que hicimos todas las poses del mundo y creo que hasta inventamos un par de poses.
Finalmente él se acostó en la cama y yo le di mi coño pero dándole la espalda y esta fue la pose que lo mató y fue donde empezó a correrse de una manera deliciosa, pude ver en su cara el rostro de satisfacción. Me dijo que estaba agotado y que por suerte yo no pesaba mucho. A los pocos segundo de que el se corrió yo también me corrí de una manera deliciosa, fue un orgasmo larguísimo el cual jamás olvidare. Descansamos un poco. Mientras descansábamos él fue muy atento conmigo. Yo me vestí (él quería vestirme pero yo le dije que no se preocupara) y empezó a darme las gracias por lo bien que lo había pasado, me dijo que jamás había tenido una mujer como yo en la cama, me felicitó de una forma que me encantó todo lo que me dijo. Yo igualmente le di las gracias por todo, que tanto yo como mi novio se lo agradecíamos y él me dijo que todas las veces que quisiera lo buscara.
Como a las 1:00 AM mi amante me dejó en mi casa, nos despedimos con un beso y yo estaba ansiosa de llamar a mi novio y contarle todo lo que había vivido, pero él se me adelantó y me dejó un mensaje en el móvil. Lo llamé a su casa y me dijo que me iba a buscar. A los pocos minutos estaba ahí afuera de mi casa esperándome, me abrazó y yo lo abracé, nos dimos un beso delicioso y me dijo:
– Ahora vente a pasar la noche conmigo a mi casa para que me cuentes todo lo ocurrido y porque ahora es mi turno de follarte.
Yo sonreí y me fuí con él. Se lo conté todo detalladamente y tuvimos una romántica noche sexual.
Gracias a mi amante pude saber cosas muy importantes, no solo que cada hombre tiene su propio sabor, sino que con mi amante tuve una tremenda noche se sexo sin preocupaciones, pero con mi novio no solo tengo simple sexo como lo fue con mi amante, sino que cuando estoy con mi novio hago el amor y de esta forma lo disfruto mucho más.
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