Un reencuentro muy feliz de puro sexo duro
📋 Lecturas: ️
⏰ Tiempo estimado de lectura: min.
Me llamo Estela, tengo 25 años, y aunque ahora soy felizmente casada y con una hija, hace pocos días me encontré con Jefry, después de más de siete años, tiempo en el cual forme mi familia y pensé que nunca más lo volvería a ver, pero este reencuentro me dejo más que agradecida muy complacida.
Bueno, mi historia con Jefry sucedió hace más de siete años, para ese entonces yo tenia 18 añitos, recién cumplidos y había entrado a trabajar a una empresa que seleccionaba chicas para promocionar sus productos, fue ahí que conocí a Jefry, él trabajaba ahí como supervisor y tenia 21 años, como era uno de los pocos hombres que trabajaban en la empresa, las chicas siempre hablaban de él y como acababan cada uno de sus encuentros, yo para ese entonces y aunque no me crean estaba todavía virgen y eso les había comentado a las chicas, de eso se entero él y puso sus ojos en mi.
La verdad él es un chico muy guapo, alto, cabello castaño y de muy buen carácter, y yo siempre mantengo mi buena figura, soy alta de pechos grandes (enormes diría yo), y de un trasero redondo y muy durito. Empezamos a salir con Jefry y fue así que empezó nuestra relación, y lo que yo creía que entregaría al hombre con el que me iba a casar, termine entregándosela a él en menos de una semana, Jefry me hizo su mujer y nuestra relación fue muy bonita y en el plano sexual, fue él quien me enseño casi todo, hacíamos el amor casi a diario, y yo me entregaba a él por completo. Pero luego de casi 8 meses de nuestra relación, a él lo mandaron a trabajar a otro estado, y se fue mientras yo esperaba sus llamadas que nunca llegaron y me abandono.
Yo decidí retirarme de la empresa y fue así que luego de casi un año conocí a Carlos, mi esposo, un muy buen hombre, hogareño y responsable, y en la intimidad no era muy espectacular pero cumplía con su misión, él sabia lo que había pasado con Jefry, y supo entenderme y después de un tiempo decidimos casarnos.
Así pasaron todos estos años, hasta que hace una semana mientras me iba a trabajar, me encontré con Jefry, Yo estaba cruzando la avenida, el semáforo estaba en rojo y fue ahí que él al mirarme, bajo de su auto y me llamo gritando como loco, yo al verlo no sabia que hacer, pero por dentro sentía una alegría grande al verlo luego de todo este tiempo, y no se porque pero fui hacia él, el me abrió la puerta de su auto como siempre lo había echo, y salimos de ahí, me pregunto por todo lo que había echo en este tiempo, y le conté toda la verdad, que me había casado, que tengo una hija, etc. y le pregunte el por que me había dejado así cuando yo estaba realmente enamorada de él y le había entregado lo más puro de mí. El me dijo que, viendo que era imposible que regresaría pronto y la oportunidad que tenia de desarrollarse profesionalmente decidió dejar que haga mi vida, aunque nunca dejo de pensar en mi y todo este tiempo estuvo buscándome.
Yo aunque en un momento me mostré algo reacia le dije lo mismo, que nunca lo había olvidado y que a pesar que me había casado aun sentía algo por él, no aguantamos más y comenzamos a besarnos como locos, no se como hacia para manejar, yo sentía como su lengua me recorría toda la boca y su saliva inundaba mi garganta, mientras que con una mano me tocaba el cuello y bajaba por mi espalda, eso comenzó a excitarme, y sin darme cuenta ya estábamos en la puerta de su departamento, bajamos del auto y entramos en el, yo no se porque pero estaba muy mojada, en eso Jefry me tiro sobre el sofá y comenzamos de nuevo a besarmos como si fuese la primera vez, yo sentía que su pene estaba muy duro, y sin darme cuenta ya estaba yo con la blusa desabrochada y él sin camisa, bajo besándome por mi cuello y llego a mis pechos.
Como les dije al comienzo eran muy grandes y eso a él siempre le había gustado, jugar con mis tetas, yo quería que se comiera mis pezones que estaban duros y apuntando hacia él, y comenzó a mamarlos y a mordisquearlos comiéndose y apretujando mis tetas contra sus dientes, yo ya no aguantaba mas y le baje la cremallera, quería ver como se encontraba su linda polla luego de todos estos años, lo separe de mi, y le baje su pantalón lentamente queriéndole mostrar que ya tenia mas experiencia en el arte de mamar pollas y no era la inexperta de antes, le baje el slip y ahí lo pude ver en todo su esplendor, al miembro que me quito la virginidad y que me comía todos los días sin parar, lo saque y lo comencé a pasar con mi lengüita, y poco a poco metiendomelo en la boca, sin dejar de mirarlo a Jefry a sus ojos y notar su entera satisfacción, no se como pero entro todo su falo en mi boca, y la verdad que la herramienta de Jefry es mucho más grande que la de mi marido, yo no paraba de chuparsela, en eso me paro y me recostó en el sofá me bajo la faldita que tenia y con un dedo hizo a un costado el hilo dental que llevaba puesto.
Así comenzó a comerme todo mi chochito, y a juguetear su lengua con mi clítoris, él sabia muy bien que eso me encantaba que siempre me había encantado pero que mi esposo no me lo hacia, así es que no pude aguantarme más y solté mi primer orgasmo en su boca y veía como se tomaba como loco toda mi miel, mientras que con sus manos apretaba mis redondas tetas, me saco el hilo que estaba muy mojado, me puso de pie volteándome hacia el sofá, me separo las pierna y comenzó a jugar, primero rozando la cabeza de su pene con mi clítoris sin metermela y con sus manos masajeando mi culo, yo ya no aguantaba más y quería probar de una vez toda su polla, así es que yo misma se la agarre y me la introduje en mi vagina, así comenzó a follarme como loco sin parar y yo no quería que pare, mientras sus manos jugaban con mis pezones y uno de sus dedos pasaban por mi boca, luego de un rato me puso en cuatro patas sobre el sofá y seguía follando sin dar signos de cansancio, yo estaba súper extasiada y sin poder contenerme me vine por segunda vez, era increíble como duraba tanto Jefry, seguía tan igual o mejor que en esos tiempos, se sentó en el sofá y me coloco encima de él, yo ya quería que pare estaba algo cansada pero no follaba así hace bastante tiempo, así es que deje que me haga todo lo que él desee, él no quería que deje de cabalgar encima de él, mientras su boca se comía mis pezones y sus manos amasaban todo mi culo, los dos estábamos empapados de sudores eso saco su polla de mi chocho y apunto hacia su glande hacia mi ano, en los tiempos que estuvimos nunca lo habíamos echo por ahí, y ya con mi esposo habíamos quedado en hacerlo pero cuando cumplamos 10 años de matrimonio, yo no le decía nada pensé que solo era un juego, y coloque su polla dentro de mi chocho nuevamente, eso hizo que él insistiera y comenzó a meterme un dedo por el culo, al comienzo me fastidio pero no le dije nada y siguió introduciéndome el dedo mientras me follaba, de pronto me tiro al piso en cuatro patas y seguía follandome sin parar y ya no me metía un dedo por el culo sino dos.
– Quiero hacértelo por el culo estelita, eso es lo único que no me has entregado.
– No, Jefry por ahí no ni con mi esposo lo he echo y al se lo quiero entregar, le dije casi suplicando.
El no dijo nada y metió un escupitajo en todo mi ano y con sus dedos comenzó el mete y saca sin ningún problema.
– No me digas Estela que aun no lo haces por el culo ni con tu marido.
– No mi amor eso te lo iba entregar a ti pero como me dejaste ya no te lo di.
Así es que bajo su lengua hacia mi culo y comenzó a besarlo y a la vez a darle escupitajos, yo ya no le decía nada fue en eso que saco su polla de mi chocho y la puso en la puerta de mi culo que estaba bastante lubricado y decir mas comenzó a introducirme poco a poco toda su polla, yo sentía como las paredes de mi culo se iban desprendiendo pero no quería gritar y me mordía los labios, el me sujeto fuerte de la cintura y de un solo tirón me metió toda su polla, no aguante y grite.
– Aaaaayyyyy… no mi amor no seas tan salvaje. por que lo haces así.
– Para que siempre me recuerdes mi amor y sepas quien fue tu primer marido.
– Ya mi vida siempre vas a ser tú el primero sigue así mi amor todo mi culo ahora es tuyo.
El no dejaba de moverse y la verdad esta sensación es algo muy excitante, sentía como sus bolas golpeaban los labios de mi chocho y mientras con un dedo jugaba con mi clítoris, yo tuve mi tercera corrida, mientras él sudaba como un cerdo, ya estábamos bastante tiempo así cuando sentí como su leche llenaba todo mi culo, saco su polla y me dio vuelta poniendo su polla en mi boca y soltando parte de su leche la cual me la tome con un gusto enorme sin dejar de chuparsela así terminamos rendidos sobre el sofá. Me dio el numero de su celular, quedando en vernos pronto, llegue a casa y mi esposo me pidió tener relaciones a la cual rehusé diciéndole que me dolía la cabeza, pero la verdad estaba muy agotada por todo lo que había echo con Jefry, de esto ya paso una semana, y ahora lo voy a llamar para que me folle solo como él sabe hacerlo.
Tendencia ahora