Quería desvirgar aquel culo de hetero

Era verano, había quedado con aquel hombre en esa cafetería, yo había contestado a un anuncio de una conocida página de contactos, Hombre casado, maduro, sin experiencia busca similar para primera vez, sentí curiosidad y me decidí, no suelo hacerlo ya que la mayoría de los que ponen esos anuncios son unos indecisos que se arrepienten en cuanto pulsan publicar. 😵

Pero por probar no perdía nada y allí estaba, en aquel local muy lejos de donde vivía, mi sorpresa fue que lo conocía, vivía en uno de los bloques de pisos de la misma urbanización que yo, le había visto en la piscina comunitaria con sus hijos o en las pistas de pádel con su mujer, dudé un instante si acercarme pero pensé que él tenía tanto que perder como yo.

También me reconoció, naturalmente, y al principio me negó ser la persona con la que había quedado, se quiso ir pero yo no le dejé escapatoria, me lo fui trajinando, le dije que a mí tampoco me interesaba que mi mujer se enterara, que por hablar no pasaba nada, que de todas formas, nuestros respectivos secretos habían quedado al descubierto. 🥰

Al final se abrió, me contó que tenía 38 años, estaba casado, tenía dos hijos, me dijo que el sexo con su mujer estaba bien pero que últimamente tenía la sensación de que le faltaba algo, había descubierto el porno gay y se había excitado mucho, había tenido algunos escarceos con jovencitos, besos y caricias pero había tenido miedo de ir más allá y se había sentido aún más frustrado, incluso había acudido a una sauna de la que había huido despavorido, yo conocía bien aquello, había pasado por eso diez años antes.

Era un hombre atractivo, rubio, pelo algo largo, ojos verdes, labios gruesos, piel bronceada, muy bien afeitado, manos muy cuidadas, alrededor de 1,70 de estatura, sabía que tenía buen cuerpo porque lo había visto en la piscina con su mujer, eran los dos muy atractivos, una de esas parejas que llaman la atención por su belleza. Trabajaba de comercial y debía de ganarlo bien por que vestía ropa cara, su reloj valía una pasta, su mujer no trabajaba, su piso era un ático, de los más cotizados de la urbanización, y tenían dos coches. 😁

Me dijo que se llamaba pepe, yo sabía que no era así pero tampoco me iba a poner exquisito, me moría de ganas de desvirgar ese culito y no quería asustarlo, la cosa fue fluyendo y al final quedamos para el día siguiente en un hotel muy famoso entre parejas que quieren pasar desapercibidas, muy limpio y bien de precio, yo lo había usado varias veces, me dijo que él se encargaba de la habitación y que cuando la tuviera me enviaría un whatsapp con el número.

Cuando me abrió la puerta al día siguiente me quedé sorprendido, ante mi había una mujer rubia, perfectamente maquillada, uñas pintadas, se había peinado con una cola sujeta con un gran lazo rosa, llevaba un collar, una pulsera, pendientes y anillo a juego, todos de perlas, un vestido de raso rosa muy corto que dejaba ver sus hombros y sus muslos enfundados en medias negras y zapatos de tacón.

 –             ¡hostia puta! Se me escapó al verlo.

 –             ¿vas a pasar o te vas a quedar en la puerta?

Entré cerrando tras de mí, todavía estaba sorprendido, para nada esperaba aquello.

 –             Coño pepe, esto se avisa.

 –             Pepe no ha venido, soy pepa y estoy muy cachonda.

Se acercó, puso sus manos en mi pecho y me besó en los labios, yo le abracé y respondí metiéndole la lengua, mordí sus labios pintados de rojo, besé su cuello, mordí el lóbulo de su oreja, se separó de mí, cogió mi camiseta y me la sacó por la cabeza, me mordió los pezones, yo mientras desabrochaba mi pantalón, como nunca llevo ropa interior, mi polla y mis huevos quedaron al aire, la tenía ya erecta, le puse las manos en los hombros y le obligué a agacharse hasta que se arrodilló delante de ella, me la agarré y se le refregué por la cara. 🤩

 –             Abre la boquita pepa. Entreabrió los labios y puse en ellos la punta de mi glande. Ábrela un poco más, esto es una polla no un chupachups, vamos zorrita.

Abrió la boca para decir algo y le metí la verga, le sujetaba la cabeza con las manos y me movía adelante y atrás fallándomela.

 –             Así, así zorra, tienes que aprender a comértelas

 –             Argg glup glup

 –             Eres virgen también de la boca ¿verdad putita?

Mi polla entraba y salía de su boca mientras me la follaba, el rímel se le había corrido por las lágrimas, igual que la pintura de labios por la saliva que se escurría de su boca por mis huevos y cuando mi miembro entraba más de la cuenta sufría arcadas. No quería correrme en su boca la primera vez, no sabía cómo reaccionaría así que se la saqué. 😈

 –             Aaaggh, cabron, casi me ahogas hijo de puta.

 –             Tienes que aprender a comerte una polla, zorra, y la próxima vez me correré en tu boca y te tragaras mi leche.

La levanté del suelo y le saqué el vestido, llevaba un liguero y un tanga negro, la hice sentarse en la cama, la tumbé de espaldas de forma que su culo quedó en el borde y le saqué la braguita, la olí y olía a polla, eso me excito, su polla tenía un tamaño normal, igual que sus huevos, todo completamente depilado.

 –             Levanta las piernas y ábrete las nalgas, zorra.

 –             Pe? Pero

 –             Haz lo que te digo, puta, plaf.

Le solté un cachete y soltó un gemido e hizo lo que le dije, agarré su polla y dejé al descubierto el glande, con la punta de mi lengua jugué con el frenillo, lamí el glande, abrí la boca y me metí su verga hasta la garganta, la saqué, recorrí su tronco, chupe sus huevos, me los metí en la boca, jugué con ellos, luego fijé mi atención en la flor de su culo, con mi lengua lo penetre, lo llené de saliva y metí un dedo. 😲

 –             Aaaaaah, cabron, que rico, que rico lo haces, ay, ayyyyyy.

Con el dedo iba dilatando su ojete, volví a aplicarle la lengua y esta vez le introduje dos dedos, jugando y abriéndolos para dilatarlo, volví a meterme su polla en la boca y comencé a chuparla con rapidez.

 –             Ay, ay cabron, como la chupassss, ay, la chupas mejor que mi mujer, cabron.

 –             Slurp, slurp, slurp? Continuaba chupando y moviendo mis dedos en su culo.

 –             Ay, ay que gustoooooo, que gusto me estás dando cabronnnnn.

Noté que se ponía rígido y me preparé para lo que sabía que venía.

 –             Ay, ay, me corro, me corro, me corrooooo.

Me largó una andanada de leche caliente, abundante y espesa, casi me atraganto pero me la trague toda.

 –             Ufff, que orgasmo joder.

 –             ¿has visto lo que hay que hacer con una polla?

Le hice levantarse, le besé en la boca y le metí toda la lengua. Quiero que saborees tu lefa? Le di la vuelta y la coloqué a cuatro patas sobre la cama, yo me coloqué de pie detrás, le puse una buena cantidad de lubricante y me la puse yo también en la polla, le abrí las nalgas, puse la punta de mi miembro en el ojete y agarrándolo por las caderas empecé a meterle la polla. 😄

 –             Ayyyyyy,  – Intentó zafarse hacia adelante cuando mi verga venció la resistencia de su esfínter pero yo lo tenía bien sujeto por las caderas. Duele, ay ay ay, duele cabron, sácala sácala.

 –             Aguanta, zorra, que este culo no era virgen puta, este culo tiene mucha mili.

Poco a poco le había metido hasta los huevos y estaba esperando a que el dolor fuera dejando paso al placer, comencé a meterla y sacarla muy despacio, notaba las contracciones de su esfínter, pepa tenía la cara enterrada en el colchón y aferraba con las manos la colcha de la cama, incremente el ritmo de la follada.

 –             Ay, ay, ayyy, canalla, sinvergüenza, me matas, me estas matando, ay mi culo, mi culo, sácala, sacalaaa.

 –             ¿quieres que la saque?  – Seguía subiendo el ritmo, estaba sudando y también la espalda de pepa brillaba, mi polla entraba y salía produciendo un ruido líquido por el lubricante. Aguanta maricon, aguanta que ya casi estoy. 😣

 –             No soy maricon, no soy maricon, ay mi culo, mi culoooo, canallaaaaa, mi culoooo  – Empezó a llorar. No soy maricon, ay, ay, mi culoooo, me gustan las mujeres, ay mi mujer, mis hijos, ay, ay, canalla, sácala, sácala, mis hijos, ¿que van a decir mis hijossss?

 –             ¿quieres que la saque, puta? Mi ritmo era frenético, cerca ya del orgasmo, lo estaba enculando con fuerza agarrándolo por las caderas y dándole azotes. Solo dímelo y paro, zorra.

 –             Aaaaaah, aaaaaaa, si paras te mato hijo de puta, aaaaaaaaa mi mujer aaaaaaa mis hijos, no soy maricon aaaaaaaaa. 💥

Con la mano se estaba pajeando, yo note como me llegaba el orgasmo, lo agarré por las caderas con tanta fuerza que le clavé las uñas, hundí mi polla en su culo y descargué una buena lechada.

 –             Aaah maricon, te voy a dejar preñada, puta.

 –             Ayyyyyy, canallaaaaa, sinvergüenza, no soy maricon, no soy maricon? Continuaba llorando? Me corroo me corrooooo.

Comenzó a eyacular, yo notaba los espasmos de su esfínter en mi polla que ya empezaba a menguar.

 –             Ay, ay, ayyy canalla, canalla, sinvergüenza aaaaaaa? Seguía llorando? Aaaaaaa, mi mujer, mis hijossss, no soy maricon, no soy maricon.

Le saqué la polla, estaba allí, con la grupa levantada y la cara enterrada en el colchón, sollozando y rezumando mi leche de su culo. 😋

 –             No, no eres maricon, simplemente has descubierto que te gustan las pollas, pero me has engañado, ese culo no era virgen.

Se incorporó y se sentó en el suelo, con la espalda apoyada en la cama, me miraba con la cara llena de churretes de las lágrimas y el maquillaje.

 –             No, sniff, no te he engañado, nunca me habían metido una polla, a mi mujer y a mi nos gusta jugar, ella, me ha comprado todo esto. Continuaba sollozando. Venimos a este hotel, yo me visto de mujer y ella me penetra con un arnés, pero últimamente me quedaba insatisfecho, quería tener una polla de verdad en mi culo, mi pobre culo, aaaaaaa, aaaaaaa? Continuaba llorando. 😄

Me quedé mirándolo.

 –             Pues conmigo te vas a hartar de polla. Agarré mi miembro, me puse de pie frente a él y comencé a mearlo. Esto para que huelas a hombre.

Tuvimos varios encuentros más, se descubrió bisexual y la verdad es que lo pasamos muy bien pero empezó a frecuentar niñatos, cada vez buscaba pollas más grandes y jóvenes, además le gustaba que lo usarán y lo humillaran y a mí eso no me iba, al final dejamos de vernos, luego se mudó con su familia y le perdí el rastro.

By: Einar 🎈