No fue la hija, fue con la madre tremenda mujer
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Me llamo Ariel, tengo 19 años, y me sucedió algo que no esperaba hace solo 10 días, cuando fui buscar a mi novia, a su casa. Alina, mi novia de 18 años, vive con su madre puesto que sus padres están divorciados desde hace mucho.
Cuando fui el viernes después de salir de mi clase en la universidad llegue por su casa, me atendió Carla, su madre, haciéndome pasar, y comunicándome el imprevisto viaje de Alina a ver a su padre que vive en una ciudad cercana, por un problema de salud. Conversamos un rato contándome el problema, y explayándose su relación matrimonial en su corta edad al casarse su única hija siendo muy joven cuando la tuvo solo 21 años y ya mamá, el desgaste de la relación hasta su separación, Carla recién había llegado de la empresa donde ocupa un cargo ejecutivo importante, estuvimos como 1/2 hora de charla, ella sentada enfrente de mí, cruzando sus piernas a cada momento, con una falda ajustada, lo que hacia que no pudiese cubrir sus muslos, me percate que tenia una hermosas piernas.
Después de tomar un refresco, me pregunto si podía pedirme un favor, a lo que accedí de inmediato, preguntando que deseaba, me solicito que me quedase, un rato hasta que ella se bañase, por si acaso llamase por teléfono Alina, acepte por supuesto, le dije que se quede tranquila y vaya a hacer lo que tenga que hacer. Con una sonrisa me dijo que solo se bañaría y se pondría cómoda, cuando ella desapareció me puse a ver la televisión, casi una hora después apareció, con una ropa muy liviana, se sentó a mi lado a ver Tv., a los pocos minutos, se levanto a traer algo de tomar, yo gaseosa y ella algún licor, cuando se sentó de nuevo lo hizo muy junto a mí, su perfume era de lo más excitante, me pidió que la acompañase a cenar para no hacerlo sola, acepte.
Estando todavía en la sala, sonó el teléfono, atendió Carla, en el acto me di cuenta que era Alina contando como había llegado, cual era el problema de su padre, nada grave, y por la respuesta de Carla intuí que preguntaba por mí, puesto que Carla respondió, que yo había ido que ella me informo y me había retirado prometiendo llamarla al otro día y que se aprestaba a cenar sola cualquier cosa. Eso me llamo la atención, pero no hice ningún comentario, nos dirigimos a la cocina, mientras Carla me explicaba que lo que había contestado era para que su hija este mas con su padre que en ese momento estaba internado, haciéndosele estudios.
Comenzó a preparar algo ya semi preparado que tenia, alguna ayuda pedía de vez en cuando y cuando estábamos cerca no perdía oportunidad de tocarme, hasta aca era todo sin ninguna sospecha por mí. Luego de comer, volvimos a la sala nos sentamos en los mismos lugares solo que tal vez estábamos más juntos. Se repitieron las bebidas, mas el vino blanco de la comida, nos puso más locuaces y desinhibidos, la película en ese momento tenia algún contenido erótico, a lo que en cada escena, Carla hacia un comentario casi picaresco, la película su contacto y sus comentarios sumado a su perfume y la bebida, comenzaba a excitarme lentamente, creo que ella ya estaba excitada desde antes, en un momento al dejar mi vaso en la mesa roce su pezón y quedamos cara a cara muy cerca, lentamente se me acerco y me beso en mi boca, yo del asombro quede con la boca entreabierta lo que aprovecho y me la cubrió con la suya, nos abrazamos y nuestras bocas decidieron continuar juntas.
Su casi kimono se soltó dejando a mi vista un par de tetas redondas, llenas, terminadas en dos botones más oscuros duros y altaneros en su erección; hablando de erección la mía era casi total, levantando mi pantalón, puse mis manos en sus tetas, y ella bajo la suya hasta mi bulto, acariciándomelo por sobre el pantalón, le comencé a besar su cuello, y bajando llegue a sus senos, con un movimiento de su cuerpo hacia atrás me hizo saber que deseaba que le succionase sus pezones, cosa que hice, con pequeños mordiscos, y succión sus gemidos me excitaban mas, comenzó a desprenderme el pantalón, cuando lo logro, metió su mano por debajo del bóxer, tomando y apretando mi pene mientras hacia movimientos de masturbación, me pidió que me parase para que me pueda bajar del todo mi pantalón, me pare, me bajo el pantalón y el bóxer en un solo movimiento, quedándole mi pija casi en su cara, cuando me comencé a sacar mi remera, ya sentí que mi pija estaba en su boca.
Comenzó una mamada, como no me la había hecho nadie ni siquiera su hija nunca, yo le metí mis manos por debajo de su kimono, en la espalda, dándole ritmo uniforme a su mamada, hasta que me dijo que deseaba que le acabase en la boca, fue pedir y conceder, casi una misma cosa, comencé a eyacular y sentir como mi leche era tragada, quedándose con los últimos chorros en su boca para degustarla, sin decir palabras la levante la hice sentar en uno de los apoya brazos del sillón con su torso hacia el asiento y sus piernas hacia afuera, me senté en un “puff” quede con mi boca en su vagina, casi depilada, solo un pequeño bosque de vello pubico indicando que es lo que había allí, metí mi boca en su raja, la encontré mojada, producto de orgasmo recientes, le metía mi lengua, mordía su clítoris, haciendo que sus movimientos sobre el sillón sean los de una desesperación sexual total, mi boca recibía y recibía sus jugos orgasmicos casi hasta casi ahogarme, solo pedía que le de mas sexo, que le sacase el clítoris que se lo mordiese, pero todo era mientras llegaban orgasmos tras orgasmos.
Ese machacar de mi lengua en su concha y los pedidos mas sus movimientos, habían conseguido que mi pija se erecto nuevamente, mi lengua no solo se detenía en su vulva sino llegaba a su ano desparramando sus jugos a lo largo de su raja en su largo total, cuando mi lengua estaba en la vagina metía dos dedos en su ano, Carla movía sus caderas como para que esos dedos penetrasen mas, me incorpore con mi pija dura, un glande hinchado, y se la coloque en su concha solo dejo entra la cabeza, me dio sus manos para que la incorporase, cuando estuvo sentada con solo la punta adentro me alejo, haciendo que se salga.
Espera, déjame elegir me dijo, ya mi boca tuvo su ración de leche, mi concha se vació de tantos orgasmos que me sacastes, así que falta que mi culito tenga su dosis, mientras decía eso se volteo se puso en el sillón en su brazo pero en vez de estar la espalda estaba su pecho, como era de esperar su hermoso culo estaba para mi, cuando digo hermoso digo en su totalidad una nalgas redondas bien formadas duras, volví a mi “puff” y al abrirle sus nalgas descubrí un ojo palpitante que enviaba besos de labios cerrados, comencé a darle los besos que esos labios anales pedían le daba mi lengua, no solo se la daba sino se la metía mientras rogaba que la culease que le rompiese el culo, yo deseaba hacerla desear mas cosa que al entregármelo sea una sola calentura, cuando creí que estaba lo suficientemente dilatado para que no sea dolor mas que gozo me pare le frote mi pija en su ano, mientras pedía que se la metiese, cuando vi que la punta de mi glande estaba adentro, como para no resbalar.
Le pregunte si ya deseaba ser culeada, contesto:
– Si damela entera.
De un solo golpe se la enterré hasta el tronco mismo de mi pija mis huevos golpearon con sus nalgas, dio un grito de dolor, y golpeo con sus manos el sillón, se la saque casi a la mitad y de un solo golpe se la clave de nuevo, haciéndola gritar de nuevo, pero menos, y así fui cojiendola hasta que su dolor desapareció y le llego el desenfreno gritándome y exigiéndome.
– Culeame, rómpeme el orto, dame más pija, estoy en la gloriaaaa… lléname de leche mi culo, deseo sentirme llena de leche
Su hija (no se si todavía, mi novia) se quedara una semana con su padre así que durante una semana creo que cambiare una novia de 18 por una de 38 y meses, creo que gane en el cambio.
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