Mis tíos me enseñaron el arte del sexo

Hola, me llamo Carlos, tengo 35 años, soy bastante alto y corpulento ya que frecuento el gimnasio y me gusta cuidar mi cuerpo ya que de el vivo.

Desde muy joven me dedique a prestar mis servicios sexuales a mujeres, pero principalmente a parejas. Soy 100% hetero.

La historia que los voy a relatar sucedió hace muchos años, yo vivía solo con madre y desde muy pequeño tuve curiosidades sobre el sexo ya que mi mamá era soltera y a menudo traía a nuestra pequeña casa a sus parejas de sexo.

Me tocó verlo varias veces y eso hizo que mi despertar sexual sea muy temprano, me masturbe por primera vez y tuve un asustador orgasmo seco, no sabía lo que había pasado pero quedé viciado.

Me pasaba espiando a mis primas, tías, y a mi propia madre para después meterme un montón de pajas.

Pasaron los años y mantuve esa conducta, y aunque ya era un chico de buen parecer y con mucha calentura nunca pude experimentar Ada debido a mi timidez.

En Paraguay en el mes de julio tenemos unas vacaciones cortas de la escuela o colegio, entonces yo pasaba mucho tiempo solo en casa ya que mi mamá trabajaba, entonces para no aburrirme mi madre me mandó a la casa de su hermano en una ciudad cercana y mas entretenida, ellos eran una pareja joven, mi tío David de 28 años y mi tía Carmen de 27. Te iba. Un hijo muy tranquilo, casi no lo notábamos en la casa.

Mi tío era un hombre de contextura delgada y altura media, muy clásico en su apariencia. Mi tia era algo bajita, con unas piernas marcadas por el gimnasio y unas nalgas que se destacaban y eran muy llamativas. Sus pechos eran medianos a pequeños y la verdad que ya me hacía andar por la casa con sierra erección ya que siempre estaba ropa muy cómoda.

Por las siesta siempre quedaba en la sala acostada en el sofá con mi primito y dormía por lo menos dos horas, era una locura, esa ropa suelta me dejaba ver gran parte de su cuerpo, inclusive tuve la tentación de tocarla mientras dormía.

Yo me posiciona a en el pasillo cerca de los cuartos y desde ahí la observaba y me masturbaba, luego más tarde lo repetía en el cuarto, el baño y nuevamente antes de dormir.

Ella Lucia provocativa durante todo el día, podía ver siempre sus bragas o sus senos cuando se agachaba, siempre usaba unos livianos vestiditos cortos. (Con el tiempo entendí de que lo hacía intencionalmente)

En una de las veces que la espiaba mientras dormía y me masturbaba y al momento de tener un orgasmo con una pequeña eyaculación agache la mirada para limpiarme con unas servilletas de papel que ya tenía preparado, me asee el pene y cuando levanto la mirada la veo con los ojos abiertos, mirándome directamente. Tuve el susto más grande de mi vida y corrí a la habitación, tranque la puerta y ahí quedé sin saber que hacer.

Varias veces ella fue a llamarme, a tratar de sacarme del cuarto pero yo estaba muy asustado y temblaba.

Me daba miedo la reacción de mi tío. Cerca de las 8 de la noche llega mi tío y conversan en la sala por un rato, luego escucho sus pasos y me dice, Carlitos! Abrí la puerta que vamos a conversar como hombres, no te asustes. No me quedo otra opción que abrir la puerta, ellos entraron, me senté en la cama yo tía alado mío, mi tío en una silla en frente.

Comenzó a hablarme muy tranquilo, a explicarme que mi tía le había contado lo que pasó y que nadie se va enterar. Que era algo totalmente normal, que los varones siempre se masturban, y que inclusive el lo seguí haciendo. Así siguió la charla muy tranquila hasta que mi tía dice que la charla era suficiente porque tanto hablar de paja ya le dio ganas.

Yo solté una carcajadas por el susto y entonces mi tía me dice que en el mueble de la sala habían algunas pelis porno que podía verlos mientras me masturbaba, yo le dije que. O acostumbraba ver. Películas, que de verdad me provocaba más ver mujeres sexis en vivo y luego masturbarme, a lo que ella me dice que gracias por hacerla sentir sexi, y que como premio me daba permiso para observarla siempre, inclusive en momentos íntimos.

En eso mi tío dice, bueno Carmen vamos al cuarto que estoy se pone caliente y le señaló su erección, mi tía se levantó y lo despojo de su pantalón y bóxer, lo hizo sentar en la cama y le dijo relájate que la paja te la hago yo. Yo estaba estupefacto pero volando de calentura, ella lo recuesta e inicia una tremenda paja, rápida y voraz y en contados minutos ya estaba eyaculando, entonces mi tía me dice que me haga la paja

Mientras los veía comiendo, me quedé callado y mi tío le dice que necesitaba un descanso, pero tal vez nuestro sobrino puede darnos una mano mientras me recompongo. Me quedé callado, mi tía me recuesta, estira para bajo mi bermuda y mi bóxer y deja suelto mi pene erecto, en eso mi tío con una cara de sorprendido di “esa parte. O me lo contaste”¡ A lo que mi tía responde que si le contaba se pondría celoso ya que mi pene era poco más largo que el de mi tío y mucho más gruesa.

Mi tío se sienta en la silla para asistir la paja pero mi tía se quita el pequeño vestido, se quita las bras queda desnuda y dice, no perderé mi tiempo con una paja y toma mi pene y le da unas chupadas, con eso ya casi eyacule, se monta sobre mi, pone mi pene en la entrada de su vagina caliente y la va introduciendo. Mi tío inició una paja y mi tía inició en sube y baja, yo estaba en las nube y ella comienza a acelerar y a gemir, casi gritando, le miraba mi tío y le decía mira quien te está haciendo cornudo, tu pequeño sobrino que tiene más pija que vos, no paraba de saltar, y seguía diciendo ahora me siento mujer con una verdadera pija gruesa y dura.

Mi tia tuvo un gran orgasmo y yo tres mientras ella hilaba a mi tío.

Son entender mucho lo que había pasado fuimos los tres a la ducha y luego a dormir. Los siguientes últimos tres días no me hice ninguna paja, me pase comiendo a mi tia y por las noches colaboraba con mi tío para complacer a mi tia.

Después de esto los visitaba por lo menos una vez al mes, hasta que un día me presenta a una pareja amiga, también los ayude y así, hasta hoy día que ya soy un cobrador profesional.