Mi jefa me obliga a satisfacerla
📋 Lecturas: ️4761
⏰ Tiempo estimado de lectura: 3 min.
Mi jefa me obliga a satisfacerla con sexo oral
A los 24 años empecé un nuevo trabajo en New Orleans Louisiana, en un taller de mecánica, es un poco grande y tienen muchos trabajadores y clientes, hay 2 oficinas, la de la dueña del taller y la de la secretaria, está el área donde almorzamos, y luego el área de trabajamos y la bodega de materiales y herramientas, en total éramos 19 trabajadores
Mi jefa Helen una gringa muy linda 37 años, un poco más alta que yo, muy blanca, sus ojos verdosos unos lindos labios, sus pechos y nalgas no muy grandes pero con buena forma y proporción, sus piernas largas, hablaba bien el español y tenía un acento muy lindo, una mujer sin dudas muy inteligente
Desde que llegué al taller le caí bien platicábamos bastante, y de vez en cuando salíamos a tomar algo pero no había ninguna relación mas que amistad
Un día el aire acondicionado de la sala donde almorzamos se descompuso, mi jefa no se preocupo así que no lo mando a reparar, un día cuando estábamos comiendo ella salió su oficina y me miró sudado, me dijo que fuera a comer en su oficina, no lo dude y me fui sin importar que mis compañeros se enojaran
Varios días estuve comiendo junto con ella, un día me contó que estaba frustrada sexualmente, no tenía marido y no tenía tiempo para tener citas ni novios, era una mujer muy ocupada, me dijo que necesitaba un hombre para satisfacer sus deseos carnales
- Helen: hazme un masaje en los pies por favor
- Yo: enserio?
- Helen: soy tu jefa te lo estoy ordenando
Me agache frente a ella, puso sus pies en un banquito y yo le quite los zapatos y empecé a masajearle los pies, me ordeno que fuera subiendo ella iba con una falda floja, de a poquito fui subiendo a sus piernas hasta que llegue a su pelvis ella ya se estaba excitando
- Helen: quítame mi ropa interior
- Yo: no quiero
- Helen: Es una orden!
- Yo: ok
Le quite un hilo negro que traía mire su linda vagina sus labios grandes, no estaba afeitada, sus vellos rojisos, y su pepa muy blanca, olía bien sabroso
Luego me dijo en inglés eat my pussy, le dije que no lo iba a hacer, me dijo que si lo hacía me subiría 200 dólares la semana
Si decir nada acerque mi boca a su entrepierna y procedí a mordisquear a los lados de sus labios y halar sus vellos con mis labios de la boca, luego saque mi lengua y la introduje en su raja, muy sabrosa estaba esa pepa, busque su clítoris y le daba lengüetazos, en círculos y de muchas formas, luego lamia sus labios o chupaba su clítoris, pasaba mi lengua en toda su raja y buscaba meterla en su interior, no pude hacerlo del todo por qué estaba muy apretada, le encantaba todo lo que yo hacía
Hasta que llegó al éxtasis, deje de chuparla, se puso su hilo y me mandó a trabajar, ahora todos los días le chupaba su bella y preciosa vagina, lo hacía por dinero por qué yo no disfrutaba nada, solo ella tenia diversión,
Fin.
Tendencia ahora