La convencí para que me dejara ver como se la cogía el vergon de José su primer amante

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Luego de que mi hermosa mujer Silvia me complació por primera vez poniéndome mis cuernos y dada la excitación que me provocó cuando me conto con lujo de detalles la cogida tan rica y lo enorme de la verga que le metieron, nació en mi la urgente necesidad de ver en primera persona cogiendo a los dos.

Ya no me fue tan difícil convencerla, aunque si, a ella le daba un poco de pena.😁😉

Tuve que rogarle y casi chantajearla para lograr mi objetivo y cuando por fin accedió, me tocó planear esa nueva aventura y acordamos seguir una estrategia.

Silvia tenía el número de teléfono de José y ella le llamaría para decirle que lo extrañaba y que quería volver a pasársela tan bien o mejor que la primera vez.

Así que narrare tal como lo planeamos y se desarrolló el plan.

Estando yo escuchando en la extensión telefónica, Silvia le llamó y le dijo que tenía muchas ganas de volver a verlo, y José muy emocionado le respondió que el también quería verla. Silvia le dijo que yo estaría fuera de la ciudad y que quería ir a un antro discreto donde pudieran beber unas copas, bailar y ya después irse a nuestra casa para estar más cómodos.

El por supuesto acepto y le dijo que la llevaría a un antro llamado el cielo a las 9 de la noche del siguiente día que sería viernes.

Ya el viernes, Silvia se arregló muy sensual con un minivestido blanco muy sancon y algo descotado, pantimedias blancas, tanga hilo dental, zapatillas blancas muy altas su cabellera alborotada, maquillada pintada y muy perfumada.

A las 20:40 hrs la lleve al antro para que José no me viera, entro y yo me fui a estacionar el auto.

Estuve haciendo tiempo hasta que dieron las 22:00 hrs y entre al cielo.

El lugar estaba a media luz y había muchas parejas, mujeres y hombres solos. Así que escogí una mesa muy discreta pues aunque José no me conocía, no quise arriesgar nada al respecto.

Pedí a una mesera una botella de tequila, el servicio y unos cigarros.

Cuando le pague a la mesera, me pregunto si deseaba la compañía de alguna chica, pero le dije que más tarde.

La pista estaba a full de parejas y yo tratando de ubicar a Silvia y José. Tarde unos 15 minutos pero al fin pude verlos, estaban bailando muy repegados y dándose tremendos besotes. Luego dejaron de bailar y se fueron a sentar en una mesa lejos de donde yo estaba.

Sin perderlos de vista, pude ver como se acariciaban siguiendo besándose y solo paraban cuando bebían de sus copas.

Cuando Silvia se levantó para ir al servicio de damas, la alcance y me dijo que ya me fuera a la casa y me escondiera en la recamara anexa a la nuestra, (previamente yo había instalado un lente en un agujerito discreto en la pared que las separaba y que permitía ver casi al 90% toda nuestra recamara, pues en unos 30 minutos ella le diría que ya se fueran.

Así lo hice, estaba tan excitado que torpemente camine a la salida.

Antes de llegar a casa, deje mi auto estacionado a tres cuadras para que no sospechara José de mi presencia.

Entre  casa y me fui a la recámara anexa, coloque unos tapetes en el piso para amortiguar cualquier ruido que hiciera por descuido. Metí agua, una botella vacía, una silla cómoda para sentarme justo frente al lente, cerré con llave por dentro y a esperar.

Casi 40 minutos después, escuche las voces de ambos y sus pasos en el pasillo,

  • ¿Mi Reyna, estas segura que tu marido no vendrá esta noche?
  • Si papi, estará fuera una semana completa.
  • Ok chula, ven a mis brazos mamacita!

Acerque mis ojos al lente y pude ver como José la abrazo de la cintura y besándola en la boca, mientras Silvia le correspondió el beso.

  • Estas bien buenota Silvia, tu marido es bien pendejo por dejarte solita!
  • No le digas así. Mira que gracias a eso, podemos estar juntos.

José la comenzó a desvestir hasta dejarla encuerada, luego él se fue quitando su ropa y al quitarse el calzón… Uf no lo podía creer, sí que Silvia hablo con verdad, el José tenía la vergota enorme y muy gruesota! No podía creer que ella se hubiera comido ese pitote!

Me resultaba difícil creer que esa enorme y gruesa verga le hubiese entrado en la raja de Silvia.

Si ya estaba superexitado, con esa vista subió al mil y mi verga durísima.

José sin dejar de manosearle las bubis y nalgas a Silvia, la fue llevando a la orilla de la cama, la acostó y ella se acomodó en medio de la cama con sus piernas abiertas.

  • Ya estas lista para recibir toda mi verga?
  • Ya mi rey,

José muy excitado se puso un condón extra grande que Silvia había comprado, luego ella tomo un tubo con lubricante y se unto en la raja, para luego dárselo a él y se untara en su vergota.

– mírala zorrita, ya estabas bien preparada verdad? Condón a mi medida, lubricante mmmm sí que ya tienes ganas de recibir a un verdadero macho y se nota que tu viejo no calza grande. El gusto que me da, es que a ti ya nadie te llenara como yo. O no?

  • Así es mi cielo, solo contigo he sentido mi raja bien llena! Pero ya vente mi rey!

José se montó sobre mi mujer y comenzó a moverse para meterle su pitote.

Ella al sentir que le iba entrando comenzó a gemir muy rico y la muy zorra pedía más y más!

Vi como se la cogió en misionero, a cuatro patas, ella montada y tuvo 5 orgasmos.

No dejo de gemir un solo minuto, pero cuando al final se vinieron los dos, los gemidos parecían de toro bramando.

By: Axel Bisexual 😘😂

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