Esto es lo que vivió nuestra amiga Angélica en el motel

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Juan Carlos llamo a Angélica para que se vieran en el consultorio después de terminar su jornada laboral.

Angélica iba vestida con un vestido de flores sin interiores y llevaba un bolso negro. Al llegar timbro y Juan Carlos abrió para que entrara, siéntate un momento mientras termino de guardar unas cosas.

  • Ok no hay problema, tomate tu tiempo.

Juan Carlos termino de recoger sus cosas y dijo listo ya podemos irnos. Giro su cabeza hacia donde estaba Angélica y la vio sentada con las piernas abiertas su vestido un poco recogido y su cosita al aire libre. Angélica le pregunta:

  • y ¿no la vas a saludar?
  • Guaaau que sorpresa, como esta de bien, Juan Carlos se acercó y puso sus dedos en la cosita de Angélica, ella simplemente abrió más sus piernas permitiendo que pudiera colocar la mano como deseara. La froto suavemente y un pequeño gemido salió de la boca de Angélica, que se contorsiono ante esta suave caricia.
  • y las chichis también ¿están así entrega inmediata?.
  • Pues mira haber, le dijo pícaramente.

Juan Carlos metió la mano por el escote del vestido sintiendo que las chichis de Angélica estaba sin sujetador, las acaricio suavemente y saco una para lamerla y chuparla, inmediatamente los pezones se pararon y el bulto de él también.

  • Vamos era solo un saludo y pequeño anticipo de dijo Angélica.
  • Si así es el anticipo no me quiero imaginar el resto.
  • Pues imagínatelo porque me dijiste que vamos a tomar algo.
  • claro, claro vamos.

Salieron del consultorio y se dirigieron a un pequeño cafebar cerca del motel. Allí se sentaron uno frente al otro en una mesa cerca de un rincón del local, pidieron una cerveza cada uno y le pegunta Juan Carlos:

  • y ¿porque te viniste así?
  • ¿No te gusto?
  • Por el contrario, me encanto, vaya sorpresa uuuffff estas muy rica.
  • Pues lo hice para que te pusieras ansioso desde el primer momento y me puedas hacer lo que tú quieras más tarde jejejeje
  • Por favor, la vamos a pasar muy padre. Si así es el comienzo no me quiero imaginar que vendrá.
  • pues imagínatelo, mi cosita ya está húmeda ¿la quieres ver?
  • ¿Acá mismo?
  • Pues si quieres ver, solo agáchate y mira.

Juan Carlos cogió las servilletas y disimuladamente las tiro al piso.

Cuando se agacho para recogerlas, Angélica abrió sus piernas dejándole ver su cosita húmeda y palpitante. Juan Carlos la miro solo por un momento y le dice:

  • Qué cosa tan rica, ya está mojadita y palpitando uuuuffff
  • Esperando por ti.

Se tomaron la cerveza platicaron un momento y salieron.

Al entrar en la habitación del hotel vieron un yacusi ya prendido con burbujas y espuma además una gran cama con un espejo en el techo y otro en una de sus paredes.

  • Esta padrísimo dijo Angélica.

Juan Carlos se acercó y la beso pasando sus lenguas frenéticamente, saciándonos su deseo y cada vez más poniéndolos muy cachondos. Al mismo tiempo Juan Carlos empezó a darle unas buenas agarradas de nalgas aprentando suave y después fuerte, pasando a una buena agasajada por todo el cuerpo, la agarraba con ganas, con fuerza, pero a la vez suavemente, le besaba el cuello y fue bajando hasta llegar a sus pechos y los disfrute al máximo, los besaba, los lamia se los apretaba con sus manos y le halaba los pezones.

Se desnudaron y pasaron al yacusi, Angélica le beso el cuello y bajo lentamente hasta llegar donde está ese esquicito manjar que es su pene, lo acaricio con la punta de su lengua, se la paso sobre su cabeza y luego lo lamió de arriba abajo buscando la mirada placentera de Juan Carlos, siguiendo con una chupada una y otra vez de arriba hacia abajo y al mismo tiempo le acariciando los huevitos, que también chupo tratando de meter los dos a la boca, solo podía uno por uno, el placer era máximo para ambos. Se acariciaron todo el cuerpo ya sentados en el yacusi y disfrutando de las burbujas y la espuma. Se masturbaban uno al otro con la suavidad del agua se acariciaban todas las partes del cuerpo. Después de un buen rato se salieron. Y Juan Carlos chupaba la conchita con pasión, pasando su lengua y saboreando sus fluidos y para estar igual pues lo ideal era un 69. En ese momento así los dos disfrutan súper rico sus sexos y teniendo su primer orgasmo compartido, chupándose mutuamente y tragándose hasta la última gota.

Al pasar un buen rato se levantan con esas ganas de seguir gozando   pidiendo que se lo meta ya con urgencia, ya que las ganas la tienen muy caliente. Angélica desea que la penetre estando ella acostada en la cama y el sobre ella, le de unas buenas embestidas suavecito al comienzo y continúe más fuerte, después la pone en cuatro y así me da bien rico sin parar, golpeando los huevos en el culit0 una y otra vez y con ese sonido se ponen más cachondos y lo hacen sin parar, gimiendo cada vez más rápido y fuerte.

Juan Carlos saca un pequeño recipiente de un lubricante que le pone en el ano y la penetra suavemente ya que sabe que le duele un poquito, así que lo hace con delicadeza, una vez que lo tiene todo adentro contrae su c u lit0 y Juan Carlos solo gime del placer al sentir esa belleza de sensación. Angélica empieza a moverse lentamente y Juan Carlos también lo hace lentamente hasta que ella empieza a pedir que le haga rico, que se lo meta todo, que le dé duro, que le dé nalgadas, que le hale el pelo y que la parta en dos, que es su p u ta, que la haga suya, que la coja duro, muy duro.

  • Dame más mételo más una y otra vez muchas veces.

Es un frenesí de placer hasta que siente la lechecita caliente que le llena todo su interior.

  • Quiero lechecita en mis tetas papi, dame lechecita en mis tetas.

Lo saca y lo pone sobre las tetas para que salga lo poco que le queda, Angélica con los dedos lo escurre sacándole lo último que tiene. Con su lengua lame la verga hasta dejarla limpia hasta la última gota. Buscando que quedé brillosa de limpia de tanto mamarlo.

¿Les gusto?

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Carlosrelatos
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