Disfruto la leche de mi amigo

📋 Lecturas: ️7330
⏰ Tiempo estimado de lectura: 3 min.

  • Cada día quiero más néctar del amor.

Desde el día que probé el mejor néctar que da la naturaleza, el SEMEN, quedé maravillado de su sabor y cada día quiero más.

Esta es una historia totalmente real y se las quiero compartir.

Actualmente tengo 50 años, casado, pero me doy mis escapadas para verme con mi macho, que además de hacerme un rico oral, me da unas buenas cogidas.

Mi macho es gay (también quiero probar a un macho puro) y sabe como tratar a una perrita como yo. Mientras me está dando por el culo, en 4 patas, me nalguea, me dice que soy su zorrita, eso me excita y me hace gemir como su puta que soy.

Nos conocemos desde hace varios años, fuimos compañeros de trabajo y se me insinuaba, pero no le hacía caso, hasta que un día le dije que quería que me la mamara y aceptó sin pensarlo, diciéndome que era lo que más deseaba.

Durante mucho tiempo solo me hacía oral, me daba unas mamadas bien ricas de culo y en algunas ocasiones empezó a meterme hasta 2 ó 3 dedos y como estaba bien caliente sentía rico y eso hacía que me viniera más rápido.

Nos dejamos de ver un tiempo porque me cambié de trabajo y cuando nos reencontramos fuimos directos a un hotel y ya iba decidido mamarle la verga a mi amigo y tragarme su leche.

Me dijo que se sorprendió y que no se lo esperaba, aunque lo deseaba, cuando sintió que me metía toda su verga con la boca. Desde ese primer día que me tragué su leche lo disfruté. También me gusta que me la eche en la cara y que me llene el intestino de ese rico manjar.

Gracias a mi amigo Juan, que así se llama mi macho, tomar semen es lo más rico que me ha pasado. He tenido la oportunidad de hacer el amor con muchas mujeres, pero desde el día que me decidí a ser la zorrita de mi macho, lo disfruto.

Desde que vamos en el carro hacia el motel nos vamos diciendo cositas ricas. Lo quiero mucho y siempre se lo digo, también lo llamo por teléfono y le hago saber que lo extraño. El siempre me dice que me quiere y que me extraña.

Le gusta tirarme su leche en la espalda, le he dicho que se siente rico, pero la prefiero en la boca o dentro del culo para que no se desperdicie.

Por muy machos que se sientan, si un día tienen la oportunidad de beber semen, no se limiten, es lo más rico que les puede pasar. La vida es breve, hay que disfrutar el sexo y de un buen pene.

Por lo pronto sigo viviendo mi romance con mi amigo, que sabe como atenderme para dejarme satisfecho. Me manda bien cogido a casa y sin una gota de leche.

Le he dicho que mi fantasía es hacer un trío, pero quiero ser pasivo, sumiso, que el otro hombre que metamos a la cama me de unas buenas cogidas, estoy convenciendo a mi macho.

Compartir en tu redes !!