Mi jefe me hizo su nena con mi consentimiento
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Yo tenia 18 años ya había salido de bachiller, necesitaba trabajo para poder estudiar, y un amigo ex compañero del cole me recomendó con un amigo de su padre con quien el también trabajaba, los dos fuimos a hablar con el dichoso señor Galeón como se le conocía y ya mi amigo le había hablado de mi, llegamos a unas bodegas y pasamos por unas pequeñas oficinas muy lujosas de estilo clásico antiguo, había cuadros clásicos con marcos muy barrocos de madera y todo era en madera incluyendo las sillas, mas parecían oficinas de la colonia española que oficinas contemporáneas y una persona por oficina atendía
Mi amigo saludo a un señor quien sonreía mientras me veía y le pregunto si estaba el jefe a lo cual respondió que si y que si yo era el recomendado, nos anuncio y pasamos a otra oficina mas amplia de muebles amplios cual sofás y muy decorada, me senti sorprendido al ver al señor Galeón, un hombre enorme, tosco y corpulento quien sonriente me saludo estrechándome su enorme mano, me dio la bienvenida y a pesar de yo ser un chico bien puesto a semejanza del David de Miguel Ángel me senti debilitado y aminorado cual bebe o cual ridículo niñato.
Me pregunto muchas cosas y a medida que lo hacia y yo respondía me rodeaba con su mirada de un modo que parecía detallar cada centímetro, así termino haciéndome sonrojar y una risita ridícula y nerviosa empezó a hacerse notar en mis respuestas, y cuando dio por terminada la entrevista me cito al día siguiente temprano en la mañana, al despedirnos me paso el brazo por los hombros diciéndome que estuviera tranquilo que iba por buen camino y que yo le había caído muy bien, acto seguido me toco con su mano el pecho y me pellizco una tetilla con una técnica que me extremecio de pies a cabeza, me turbe mucho pero solo atine a sonreír sonrojado y a mi amigo le palmeo las nalgas.
Salimos de allí comentando sobre la posibilidad de trabajo y no de los demás detalles, sin embargo mi amigo resaltaba lo machote inteligente y maduro que era su jefe, lo admiraba notablemente y resaltaba mucho sus cualidades, luego se refirió al pellizco que me hizo como una muestra de aprecio y cariño, me dijo que me había pellizcado una teta como muestra de lo bien que yo le había parecido y que no hacia eso con cualquiera, riéndose dijo tambien que no le faltaba sino que me diera un beso en el próximo encuentro, yo reí tambien tomando aquello a modo de broma, y después que nos separamos cada quien para su casa me quede pensando en todo aquello.
Nunca había conocido un hombre tan corpulento y grande como don Galeón y la verdad no se si nos trato como nenes o como a nenas, su aptitud no fue del todo clara pero jueputa si ese pellizco en mi tetilla me jodió porque me gusto, como hizo…, acaso fue por tener la mano grande que lo sentí así o que rayos, no pero si a mi me gustan son las mujeres porque diablos tengo que sentir algo con un hombre, pero fue que me extremecio y todavía lo siento en mi pecho, ha y para acabar de completar mi amigo dice que solo falta que me bese a la próxima, rayoos porque tengo que imaginarme que ese señor me bese como si yo fuera maricón, noooo que me pasa maldito pendejo.
Al día siguiente me levante y me arregle rápido, menos mal estaba a la hora bien siendo que en la noche me costo dormirme, estuve pensando mucho tiempo en todo aquello, no se lo que tenia pero era como si la parte femenina que dicen tenemos los hombres me estuviese jugando una mala pasada o diciéndome acá estoy conocerme, sentía ganas que don Galeón me pellizcase de nuevo y que me nalgueara como a mi amigo, nunca había sentido ni pensado algo así en mi vida, en mi cama me toque las nalgas y me masturbe y hasta imagine que ese señor me besaba y me tocaba.
Tal fue mi sofisma que me fui un poco deportivo a la cita y en vez de camisa o camiseta me coloque una franelilla abierta a los lados dejándome ver las tetillas, pase por las oficinas y en una de ellas vi a mi amigo que trabajaba como asistente de otro señor, les salude y sonrientes me desearon suerte y continué, al fin al llegar a la oficina estaba don Galeón de pie y de espaldas a mi arreglando algo, lo salude el se giro y muy alegre vino a saludarme con un abrazo, rayos senti su mano apretar mis nalgas y luego me hizo sentar, yo quede nervioso y sonrojado como el día anterior, esa mano volvió a debilitar todo mi ser y lo vi a el como todo un macho grande y lleno de poder sobre mi.
Me dijo que había estado pensando y que por el momento yo podía ser su asistente personal y que me podía pagar mejor que a los otros asistentes pero que debía pasar dos días de prueba primero, yo le respondí sonrojado que yo haría las cosas de la mejor manera para obtener el puesto y todo lo necesario, entonces se puso de pie y pero sirvió dos copas de un licor que el tenia junto con otros, me ofreció una y brindo por el nuevo empleado, los dos bebimos y repetimos la dosis, al cabo de un momento me sentía mas tranquilo pero al caminar un poco el de lado descubrí que estaba empalmado y mucho en realidad, el se me acerco despacio y me rodeo con una mano por los hombros y me masajeo un poco, luego me acaricio la mejilla y delineo mis labios con un dedo muy sensualmente.
Mi respiración se fue acelerando rápidamente, una fuerza superior a mi me lleno por completo y su mano volvió a pellizcarme la tetilla, pero esta vez fue directo por debajo de la franela, waooo no joda me volví loco y tome aire apretando mis labios de placer, don Galeón me tomo de la mano y me deje llevar de el, se sentó en uno de los sillones y me dejo de pie, se desabrocho el pantalón y se saco su enorme verga, yo tenia miedo y respiraba aceleradamente, el hizo lo mismo conmigo solo que me saco el pantalón con interior y todo y tambien el calzado y las medias, me pidió que me sentara en su pierna derecha y así lo hice, senti su piel con mi cuerpo desnudo y un inmenso deseo de ser tocado y querido me sometió por completo.
Su enorme mano me rodeo las caderas y con la otra se masajeo su verga, me pidió que se la agarrara y la tome con mi mano con un placer total, no podía creer lo que estaba haciendo tenia una verga una hermosa verga en mi mano con tanta placidez y descaro que me hacia sentir feliz, si eso era ser marica era delicioso ser marica, para completar en ese momento don Galeón me trato como una nena diciéndome que mami tienes un cuerpo soñado, lo mire a la cara y le dije que gracias, y en ese momento tocaron a la puerta y una voz al otro lado revelo que se trataba del jefe de mi amigo y mi jefe le dio orden de pasar, yo me asuste mucho y el hombre entro viéndome totalmente desnudo sobre las piernas de mi jefe y con su verga en mi mano.
Uff jefe a usted siempre le tocan unas preciosuras dijo y el jefe sonrió me hizo poner de pie y dándome la vuelta me tomo de las nalgas enseñándoselas y el jefe de mi amigo se toco entre las piernas apretandose y saboreándose, me senti como una nena de veras, el jefe le pregunto si tenia un poco de lubricante y el hombre saco un frasco pequeño y se lo iba a dar y el jefe le dijo que mejor me lo aplicara el pero que solo le iba a dejar hacer eso, el jefe me hizo agachar y el hombre ni corto ni perezoso se unto un poco y pronto senti sus dedos por mi culo haciéndome apretar las nalgas, me hizo estremecer a mas no poder y fui sintiendo luego como en un juego cuando sus dedos se turnaban para ir entrando en mi culo paulatinamente.
El jefe se puso de pie y me puso su verga a la altura de mi cara mientras se untaba algo con olor a fresa pidiéndome que se la chupara, nunca lo había hecho y despacio la acaricie con mi lengua hasta que empece a chuparle el glande y a intentar chuparla hasta la mitad, el jefe de mi amigo estaba feliz jugando con mi culo y yo disfrutaba sintiendo sus dedos dentro de mi que resbalaban como mantequilla adentro y afuera, el jefe le dijo que me hiciera un poquito con la lengua y luego se fuera y de inmediato senti su lengua inquieta en mi culo haciéndome apretar las manos de gusto, eramos tres hombres pero yo era la nena la puta del paseo y no me cambiaba por nada ni por nadie.
Mientras el jefe de mi amigo me metía su lengua divina en el culo mi jefe me hizo inclinar un poco y me beso en la boca de un solo envión, la sorpresa logro que le correspondiera de inmediato y nuestras lenguas se disfrutaron un buen rato, el jefe templaba su lengua hacia afuera y yo se la chupaba hasta que el jefe le pidió al otro hombre que ya era suficiente, entonces el otro dijo que estaba super caliente y que el culo de su subalterno le iba a calmar la gana y salio de la oficina, entonces deduje que mi amigo era otra puta mas de ellos y que llevaba un buen tiempo disfrutando en la empresa.
Luego de que salio el jefe de mi amigo don Galeón tendió un sofacama y termino de quitarse la ropa por completo, me pidió que pusiera en posición de perrito, se unto aceite en su verga y luego lo hizo en mi culo, allí estuvo metiéndome su dedote una y otra vez y yo sentía delicioso y con ganas paraba mas mis nalgas lo que le encantaba a mi jefe que decía que mis nalgas eran hermosas, después senti su vergota enfilarse en la en la mitad de mis nalgas y con paciencia y mi ayuda al fin senti adentro su pedazo de carne en rollo caliente, mi jefe era mi hombre mi macho mi dueño, el se dio cuenta que era primera vez y que me estaba haciendo su mujer su nena su puta personal.
Era increíblemente rico como me comía mi hombrote, me volteaba la cara y me besaba y a mi me encantaba sentir su lengua con la mía, era increíble que yo estaba siendo culeado, gozado y disfrutado con toda mi aprobación, mi señor Galeón se tumbo boca arriba y yo me senté sobre el, yo mismo me ayude a meterme su verga y monte sobre ella sintiendo como por dentro me hacia explotar de emoción una emoción que nunca había experimentado, estábamos en esas cuando se empezaron a escuchar unos gemidos fuera de la oficina, era la voz de mi amigo que estaba siendo jodido por su jefe, hayy que rico papi decía con la voz partida, y eso me puso a mi igual y con la voz partida a pedirle a mi jefe que me dejara chupársela.
Fue la tarde de toda mi vida, mi parte femenina se quedo prendida en mi para siempre y lo celebro con orgullo, cuando salimos de la empresa ese día los dos teníamos el culo como embalsamado y a la vez intocable porque sentíamos que un rose bastaba para ponernos en posicion de perrito, salimos como dos locas dichosas y felices de nuestros jefes y de nuestra empresa. Bueno mis bellos ya llevo dos años (trabajando) allí luego les cuento como nos ha ido. Muaaa en esas verga.
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