Nora, mi primera vez la cual todavía recuerdo

Javier mi novio de aquel entonces siempre me había besado y acariciado en obscuros rincones de mi casa en Av. Insurgente. Si no era en la escalera que subía a mi departamento, era en los lavaderos o en algunas ocasiones, dentro de mi departamento cuando no había nadie, regularmente los domingos cuando se iba al templo mi hermana Teresa.

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Nunca tuvimos penetración, pues siempre teníamos que estar con cuidado para no ser vistos y los nervios nos comían. Un sábado de marzo, Javier fue por mi a casa Y me dijo que si lo acompañaba a casa de su hermana, por que le había dejado encargado, ya que ella se había ido a Colima a buscar trabajo. Esa vez recuerdo que dije en mi casa que iba al cine con el.

Salimos de mi casa y cruzamos el puente de potrero, llegando a la esquina del sardinero. Ahí tomamos el micro que pasaba por la raza, donde nos bajamos y enfilamos a casa de su hermana. Yo caminaba abrazado de el, llevaba mi blusa blanca, una falda larga azul tableada roja y mi suéter azul cielo.
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Ahí llegamos al edificio donde vivía su hermana, subimos las escaleras y entramos. Yo me senté en un sillón largo, en lo que el entro al baño. Cuando salió se sentó a mi lado y empezamos a platicar. Después intercambiamos besos hasta que me empezó a acariciar con sus manos por mi espalda y luego toco mis pechos, lo cual me gusto mucho. Yo también hice lo mismo hasta llegar a sus nalgas.

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El me beso mis orejas y mi cuello, regresando a mi boca, cuando de repente, me desabrocho el botón de la blusa y me fue tocando el pecho hasta rozar mis pezones con sus dedos y me siguió besando del cuello, la boca mis orejas y ahora los pechos. Con su lengua me los rodeaba y me hacia suspirar y moverme al grado que no me di cuenta cuando el suéter callo con toda la blusa y mi brazier estaba abajo de mis pechos sin desabrochar. Yo también no me quede atrás y le quite la camisa y sobe su pecho con mis palmas. El de repente se recostó metiendo sus manos entre la falda que traía, rozando mis nalgas y la entrada de mi ya tan húmeda vagina, pero sobre mi calzón, algo grande blanco, pero medio transparente que una vez me regalo mi cuñada, esposa de mi hermano. Yo empece a bajar mi mano y llegue a donde estaba su pene, yo ya lo había sentido antes, pero esa vez fue distinto, ya que acaricie ese monte, pero baje el cierre de su pantalón de mezclilla y lo saque y rodee con mi mano izquierda, lo movía de abajo hacia arriba al ritmo de su lengua y la mía en su boca. De repente no se como pero me puse en sus piernas le baje el pantalón y admire su pene y vi como mi mano subía y bajaba, de repente lo lleve a mi boca e inicie a hacer movimientos entre mi boca con el lo llevaba de un cachete al otro hasta que empece a subir y a bajar en el, me satisfacía el hacerlo así, nunca lo había hecho, pero me gustaba tanto, así lo moví, bese, lengüetee y vi como Javier cerraba los ojos disfrutando, lo saque de mi boca y me lo pase por mi pecho hasta llegar a mis pechos los cuales rodee con su cabezita hasta subir hasta mis aureolas que están muy duras y paraditas, yo disfrutaba toda y le sonreía.... Flaco te gustaaaaa y el me respondía que si que le encantaba, pero con voz entrecortada. Yo estaba hincada haciendolo y el me acariciaba mi cabeza y espalda sin cesar. Yo seguí haciendolo y de repente su mano llego por mis nalgas por abajo d mi falda, pero yo todavía traía mi calzón, el cual esta súper humedecido, empapado diría yo con sus manos lo puso como si fuera una tanga y me acaricio mi ano, para después llegar a mi entrada vaginal, la cual recorrió su alrededor, y me hizo suspirar, hasta que de repente me metió el dedo y yo sentí una gran sensación que no se si suspire o grite de placer, me lo metió y saco varias beses, yo cerré mis ojos y se lo seguí chupando pero sentía tan rico al hacerlo y que me lo hicieran que perdí razón de mi. después lo saque de ni boca y chupe sus bolas, el me seguía metiendo el dedo, que jadeaba mucho de placer. como pude chupe mas fuerte y me fui montando en el. el me dedeaba muy fuerte y me acariciaba mis nalgas. mi boca llego as boca y mi vagina quedo cerca de su gran pene duro, me quito el dedo y como que hizo aun lado mi calzón....

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me observo y con mis ojos entreabiertos acente, después me metió poco a poco su pene, sentí como me iba desquebrjando, lo cual me hizo lanzar un pequeño suspiro de dolor y placer a la vez, sentí como recorría esa grande cosa las capas interiores de mi vagina, solo cerré los ojos y exhale un ay de dolor, aun in terminar de entrar hasta donde podía, me senté tempestivamente sobre el hasta donde llego des pues comenze a moverme en un va y van tempestivo que me dejaba sacar unos gritos que no sabia donde los tenia, así estuve un tiempo, hasta que de repente me baje, me quite el calzón y me empine, el me lo metio de repente y me daba de topones en la cara con el respaldo de la sala, muy fuerte pero rico, todavía tenia la falda azul puesta, el me tomo con su mano la cabeza y me jalo el pelo, extrañamente me gustaba eso, también con su otra mano medio una nalgada y lejos de enojarme, le pedí mas que me lo hiciera mas fuerte, fue tanto que me gusto que no sentía dolor sino placer, mi cara golpeando el sillón, mi pose de en 4 desecha por el placer, hasta que lo saco y me volteo, todavía con la falda puesta rápidamente me lo metio, lejos de sentir cansancio, sentía fuerza y gritaba, hasta que de repente lo saco y me lleno todos mis pechos y parte de mi cara, yo me batí con sus chestersillo y recorrí mi mano por mis pechos y probe mis dedos batidos con mi lengua, su sabor era rico que no me arrepentí de hacerlo, yo todavía quería mas y como pude lo senté, me quite la falda que estaba mojada y me sente encima de el dándole la espalda y metiéndome el chestercillo de Javier, lo hice que se parara otra vez y lo batí y lo batí hasta que gemiiii muy fuerte y creo que el se vino dentro de mi porque me quede quieta de repente y sentí como volvió adelgasarse su pene, quede muy rendida bajandome y recostandome en el suelo, donde vi que en mi falda había un poco de sangre, era mía, con esas ligeras manchas entregue mi primera vez, la cual me encanto, después me pare lo abrace y bese como agradecimiento. después me levante y en un espejo me mire toda despeinada como si me hubiese acabado de despertar de una noche larga, vi mis nalgas todas rojas de las palmadas que me dio.

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nos empezamos a vestir, no decíamos nada. me puse todo menos mi calzón, el cual nunca encontré y de repente me dijo, ?oye que bonita mancha tienes en tu nalga?, yo le dije ?es que soy unica, te quedaste con algo mío?? el respondió, ?si, tu primera vez?, le respondí ?si, pero dame mi calzon por que siento aire.....?, nunca me lo dio, llegue a mi casa lo mas tarde que pude para que no se dieran cuenta de mi figura y esa noche no pude dormir pensando en el, me tocaba y pensaba en el, lo único que no pensé es que ese seria el inicio de otros mas; Pancho (esposo de una amiga de aquel entonces), Joel, Eduardo, Vicente, Armas, Felipe, el Tito y otros que en su momento les contare. Javier te sigo amando y recordando.