La amiga de mi hermana (I) cuentos de sexo

Autor: Berit | 08-Aug

Heterosexuales

La amiga de mi hermana era encantadora. Como ella, contaba con quince primaveras en su haber y no solo su cuerpo había crecido y florecido con el paso del tiempo, sino que además lo había hecho estupendamente, convirtiéndose en una jovencilla rubia, de ojos castaños que cubría como un leve velo su flequillo presumido, echado a un lado, boquita carnosa y de color vivo, unos pechos de escándalo, llamativos del todo para su edad y que eran la envidia de todas sus compañeras, pues, además de voluminosos, se encontraban firmes y redondeados en su esbelta figura de graciosas curvas, con la guinda de un trasero respingón y unas piernas que brillaban esplendorosamente al sol y resultaban a la vista suaves y apetecibles cuando se atrevía a mostrarlas. Andrea se llamaba.

Para mí, un chico de casi dieciocho en pleno auge sexual, no habían pasado desapercibidos estos atributos. Fantaseaba a menudo con su figura y con su carácter pícaro y cariñoso, que tenía el placer de haber conocido por ser ella amiga íntima de mi hermana, fruto de compartir largo tiempo juntas en el instituto, y me llenaba las manos de semen y la boca de gemidos soñando con aquella ya no tan niña, escandalosa y erótica.

Día normal entre semana, sofocante, fue en el que recibí con enorme excitación que Andrea, invitada por mi hermana, vendría a pasar tres días en nuestra casa de verano. Apareció en nuestra puerta, traida en coche por su padre, al viernes siguiente. Desde que entró y se acomodó en el cuarto de invitados, acompañada por mi hermana se sentía como en su propio hogar, y a las pocas horas estaba ya totalmente relajada e instalada.

Sabía yo que algo tramaba, pues durante esas primeras horas insistía en hablar conmigo, acabando en realizar actividades los tres juntos, nosotros y mi hermana, aunque como el pueblo resultaba pequeño y extremadamente aburrido solíamos pasar la mayor parte del tiempo en la casa y su pequeño jardín, que encontrábamos sin duda más excitante. Ella por su parte hallaba en mí respuesta a todos sus coqueteos, poco a poco nos íbamos compenetrandi y, a espaldas de mi hermana, atrayéndonos mutuamente de un modo evidente para los dos, pues las sonrisas y las largas miradas eran cada vez más frecuentes y más apasionadas. Pero nuestra atracción necesitaba de mucho más, y pronto se nos presentó la primera oportunidad de demostrarlo.

Había entrado mi hermana a ducharse, tarea para la que acostumbraba a emplear largo tiempo, y mis padres estaban atontados frente al televisor, tumbados y agotados. Andrea y yo, con la coartada de esperar la salida de mi hermana, salimos al jardín delantero para sentarnos a la sombra en los escalones de la entrada.

Conversamos, pero no duramos ni cinco minutos. Me miró a los ojos y agarró mi mano, acercando su cuerpo contra el mío mientras arrastraba el culo. Ingenuo y orgulloso había infravalorado de inicio y por prejuicios sus habilidades. Desde el principio me llevé una gran sorpresa. Me besó acaloradamente, enredando su lengua con la mía y sacándola para después chupar mis labios y mi barbilla despacio y con muchua saliva. Retiré estirándole su parte de arriba del bikini blanco y acaricié uno de sus pechos, su pezón puntiagudo parecía extremadamente sensible, así que mordí y lamí cuanto pude, sin encontrar mucho tiempo. Ella agarró mi cabeza para volver a besarme, obligándome a levantarme, conduciéndome con los labios hacia arriba.

Una vez estábamos los dos de pie me quitó la camiseta. Agarró mis pantalones y de un único tiró los bajó, junto a los calzoncillos, por debajo de las rodillas, dejándome completamente desnudo rodeado de la hierba y los cipreses, el viento silbante. Agarró mi pene, totalmente empinado, colorado y poderoso con sus venas mal disimuladas, desde la base y con las dos manos, ejerciendo un poco de fuerza que a mi me dió la sensación de explotar, se lo metió en la boca abieta con tanta pasión que por poco no llegaba a cubrirlo por completo, temiendo yo porque llegara a ahogarse por pretender aguantar así unos segundos. Le ayudaba, sin duda, el desparpajo de su juventud, que se ponía arrodillada al servicio del placer. Comenzó a soltarla con los labios mojados pegados a la piel y cuando lo soltó por entero pegó tal chupada, amigos, negándose a dejar escapar el prepucio entre la boca que se cerraba, que resonó descuidadamente un sonido de succión, y posteriormente de explosión, que provocó en mí un espasmo repentino de puro goce.

Con una sonrisa maliciosa se mostraba precavida por si nos habían escuchado, se detubo un instante y después volvió a metérselo en su garganta, caliente y húmeda. Iba lenta, con dedicación, pero pegaba hasta asfixiar el pene con sus labios de aquella manera, produciendo con la fricción mojada una sensación indescriptible, continuación de las anteriores. No cesaba de mirarme, no me quitaba la vista mientras lo hacía, en tanto que se acariciaba con sus dos dedos arqueados, y yo alternaba vistazos al cielo causados por el placer inaguantable y a su cara, entonces se frenaba y sonreía una vez más sin sacárselo de la boca. Se percataba de que yo estaba enloqueciendo, como en un perpetuo orgasmo sin llegar a serlo, mientras ella continuaba arriba y abajo.

Remató la faena con un detalle que sencillamente terminó con mi débil resistencia. En el éxtasis, escuchando como un espectáculo particular para mi mismo el sonido de la lengua de Andrea, frenó, algo que a estas alturas formaba parte del ritual. Mirando de frente el falo le sacudió un beso en la punta del prepucio, hormigueante y maternal, que sobrepasó hasta mis límites. El semen salía, ella lo notaba al contacto con sus dientes y su paladar, pues el beso fatal no había concluido aun, ni mucho menos, sino que se reconvirtió en más intenso. A la vez que con sus manos empujaba toda mi verga hacia su boca, con los labios hacia lo propio en el prepucio en la dirección contraria. Entonces un esperado orgasmo colosal, acompañado de una grata sensación como si estubiese siendo ordeñado y purificado. La mente me quedó en blanco y el espíritu en paz unos segundos.

Habiendo vuelto en mí, conservaba Andrea un reguero del líquido chorreando hasta su barbilla. Levantándose y coloándose la parte que faltaba del bikini, a carcajadas me comentó que no había podido evitarlo y se lo había tragado enterito, aunque yo no podía haberlo visto. La creí. Me subí el pantalón y me coloqué de nuevo la camiseta. Oimos movimiento y nos situamos. Al cabo de un rato apareció mi hermana, ajena a todo esto.

Relatos relacionados

        De vuelta con carolina, al otro día de haberlo hecho con mi hermana Carolina, la cruda moral me duro unas semanas, no sabia que hacer, ella se me arrimaba coqueta, y me daba besos delante de nuestros padres en la comisura de los labios cuando se despedía yo sentía que mis padres veían lo cachondo de sus besos y eso me tenia asustado, pero aun así me prendían, y hacían que me calentara, habían pasado 3 semanas desde que habíamos cogido y no habíamos comentado...
13-Sep
31419
Exploro más profundamente y tú tiemblas; tu cuerpo se tensa, pero soy suave tal como había prometido que sería.Miro profundamente tus ojos y te dicen los mios . Tu sonrisa se relaja y tu te abres a mí Comienzas a pedir y rogar que apure lo que venga que empiezas a no poder controlar nada, pero me tomo tiempo, lentamente, esperando causarte la mejor experiencia de tu vida.Te mira preocupado y pregunta si es muy doloroso. Tus ojos están llenos de lágrimas; con la cabeza contestas que no y le...
22-Apr
11468
Mi hermana tuvo que ser hospitalizada para una operación menor, así que le dije que no habría problema alguno en que su hija durmiese esa noche en mi casa, conmigo y mi esposa. Mi sobrina cumplió recientemente los 18. Se trata de una niña en muchos aspectos, extremadamente tímida e introvertida. Mi mujer ya dormía, madruga mucho y suele estar pronto en la cama. Mi sobrina se daba una ducha y yo, que suelo ser muy despistado, quise entrar en el baño para echar una meada, sin acordarme de que...
08-Jul
132853
Mi nombre es luciano vivo en argentina pcia de san juan.mi prima también pero en el campo.de muy joven deceaba a mi prima patricia.una morocha delgada de pechos pequeños.cintua diminuta dueña de un culo redondo y bien parado.recuerdo yo tenia mas o menos 18 años y ella 15 y yo ya me pajeaba por ella.me exitaba su cara su cuerpo me imajinaba cojiendola y me masturbaba cada vez que sus padres venian de visita a casa o nosotros visitabamos a ellos.pero nunca paso nada.cada uno iso su vida y al...
05-Feb
12844
eran los 1:00 pm de la tarde, etsaba saliendo del colegio y me llamaron para invitarme a una rumba, a la cual iva a invitar a mi novia.el dia de la rumba mi novia me llamo a ultima hora y me dijo que iva a llevar a la amiga que estudiaba con ella esa noche,despues de un par de horas y de tomar un par de copas de aguardientes,fuimos a la casa de mi novia y nos e,pezamos a ver una pelicula la cual duro una hora,mas tarde mi no...
23-Sep
24104
Ese día quede de salir con este hombre, del cual no diré el nombre, era jueves que en Bogotá los bares son muy movidos. Quedamos en un lugar a eso de las 20h, era la primera vez que nos veiamos; únicamente habíamos conversado por chat y por telefono, al verlo noté que era más musculoso y no tan alto como creí ( yo mido 1,70 y el media alrededor de 1,75). Lo saludé con un beso en la mejilla yo no buscaba nada en concreto pero dentro mio tenía mi...
07-Feb
26756
Yo tenia la fantasia de que mi esposa y yo hicieramos un intercambio de parejas, tenia ganas de verla cojer con otro y al mismo tiempo yo cojerme a otra mujer, por mas que se lo pedia nunca pude lograr que al menos conocieramos a alguna pareja y nos contara de sus experiencias y llego a tal punto que se molesto tanto que me dijo que no queria saber nada mas y no mas se lo comente pero en mi seguia esa idea.Una tarde me encontraba en casa, yo estaba...
10-Oct
226290
[Infidelidades] Me quede unos segundos observando la escena, mi mujer arrodillada, sus piernas separadas y su espalda y culo aún brillantes por el sudor de la jornada. No recuerdo que me calentó más, si su voz de puta pidiendo lechita para su boca u observar como por los pelos de su conchita semiabierta escurrían gotas de semen que caían de su culo. El primero en verme fue Jorge, quien con cara de conejo asustado se levantó rápidamente y tapó su paquete con las manos. Ella volteó lentamente, casi intuía mi presencia, pero al contrario de Jorge sus ojos no eran de temor sino de calentura.
01-Dec
29045
DESPUES DE TANTO ESTAR CHINGANDO CON MI ESPOSA, QUE SE DEJARA COGER POR OTRO Y POR MI, ACCEDIÓ DICIÉNDOME QUE SI NO ME HIBA A MOLESTAR DE VERLA COGIENDO CON OTRO Y LE DIGE QUE NO, Y EN VERDAD ME DEJABA DUDAS. QUE TAL SI EL OTRO GUEY LE GUSTABA. Y LUEGO ME PONIA EL CUERNO A ESCONDIDAS, PERO LO DICHO DICHO ESTABA, Y YA NO ME HIBA A DETENER DE MI PINCHÉ IDEA, NOS ARREGLAMOS Y LE PEDI QUE SE PUSIERA ROPA INTIMA MUY SEXY, TANGA Y SIN SOSTEN, LE...
09-Apr
389344