Me inicio una doctora
Había encontrado un trabajo nuevo, y fui a un Centro Médico para una revisión previa. Aquella misma tarde a las 7 recién duchado llegué a la consulta del médico era una tarde de Diciembre muy calurosa. Subí hasta el noveno piso y pulsé el timbre de la consulta, al cabo de una rato me abrió una chica de aproximadamente de mi edad unos 19 años, le dije que tenia visita a esa hora.
- Ahora mismo le atiende la doctora - dijo.
Mientras me acompañaba a la sala de espera le pregunté:
- ¿Pero que no es la consulta del doctor López? -
- Sí, pero esta de vacaciones, y en su lugar visita la doctora Laura - me respondió.
Yo me puse tremendamente nervioso, no me gustaba nada que una mujer me hiciera aquella revisión médica, pero nada podía hacer, así que pase a la sala de espera como cordero entrando en el matadero. Al cabo de lo que me pareció muy poco tiempo, entró la recepcionista y me indicó que ya podía pasar al despacho, la seguí y entré en una austera sala con el mobiliario de una consulta cualquiera, detrás de una gran mesa se sentaba la doctora Laura, de unos 38 o 40 años vestida con la habitual bata blanca. Me indicó que me sentara y me sobresalté al oír como se cerraba la puerta detrás de mí. Me senté algo enervado en una de las dos butacas enfrente de la mesa y oí como la doctora se me presentaba, después de decirme que se llamaba Laura me hizo una larga serie de preguntas acerca de enfermedades, hábitos, etc. para crear mi historial médico, algunas de ellas bastante directas y humillantes para mí, como la de cuándo ha sido la ultima vez que has realizado el acto sexual, tentado de mentirle y desechando la idea de inmediato, le contesté que nunca lo había realizado, ella posó sus ojos sobre mí y continuó con sus preguntas, al cabo de 15 minutos, acabó puso todo mi historial en una carpeta y me dijo:
- Desnúdate, allí tienes un biombo - dijo señalando una esquina de la habitación.
- Doctora, hum - dije yo.
- No me llames doctora, llámame Laura, ¿si? -
Fui detrás del biombo y me quité toda la ropa, excepto mis slips, y salí. Cuando ella me vio me ordenó que me quedara completamente desnudo, yo lo hice así y tapándome como pude salí nuevamente detrás del biombo, ella me señaló la camilla, hacia donde fui y me acosté. Empezó su exploración con el estetoscopio durante bastante rato y después con sus manos palpando mi cuerpo por todas partes, reparé que no utilizaba los guantes para nada, sino que lo hacía con sus manos desnudas. Me hizo separar las piernas y palpó el interior de mis muslos, yo cada vez estaba más incomodo con sus tocamientos, llego a mis testículos, los sopesó, los apretó, mi pija empezó a cobrar vida muy rápido y ella lo notó, yo me quería tapar cuando ella me dijo:
- No tienes por qué preocuparte, es una cosa normal en los hombres.
Su voz se había vuelto muy dulce y sensual, mientras su dedo acariciaba mi escroto de arriba abajo, mi placer aumentaba por momentos, la piel de mi escroto arrugada por la excitación hacía que mis testículos parecieran una nuez, de repente tomo mi verga con una mano y empezó a masturbarme, yo cerré los ojos y me dejé invadir por el placer.
- ¿Nunca te habían hecho algo así? -
- Nunca - dije yo controlando mi voz a duras penas.
- ¿Sabes que estás muy bien dotado? Tienes una pija preciosa, Hummmm... Lo que me extraña que no hayas estado con ninguna mujer, ¿Te pajeas muy seguido? - me preguntó de sopetón.
- Sí - contesté yo.
- Así, ¿qué prefieres el sexo en solitario? ¿O te gusta más lo que te hago yo? -
- Sí, prefiero lo que me haces tu -
- Ven - me dijo.
Me agarro de la mano y me llevó a otra habitación contigua, que resultó ser un dormitorio, con una cama grande, un sofá de piel y un tocador, ella con un gesto me ofreció sentarme en el sofá, el contacto de la piel en mi cuerpo desnudo me erizó todo el vello. Ella se sitúo delante de mí y con una mirada de intensa lujuria empezó a desabrocharse la bata, ni en las más imposibles fantasías, ni en mis más ardientes pajas me había imaginado una situación así. Cuando llegó a su ultimo botón, se abrió la bata completamente y puede contemplar la primera mujer desnuda que veía. Toda su cara era de autentica lujuria, su cuello hermoso se erguía por encima de la perfecta curva de sus hombros sus pechos eran generosos y turgentes, sus pezones reducidos a la mínima expresión apuntaban hacia delante excitados y erectos, su vientre era terso y plano, su ombligo apenas un pequeño y perfecto cráter, la curva de sus caderas era la perfección, su monte de Venus, que abultaba lo justo, estaba tapizado con una pequeña flecha de vello púbico que apuntaba al centro de su sexo, escondido entre sus bien formados muslos.
Ella al ver mi cara de admiración sonrió, mientras lentamente se daba la vuelta y me dejaba ver toda su espalda y el escorzo de sus nalgas que amagaba sus partes mas intimas. Se sentó a mi lado y yo que ya no tenía rastros de mi timidez le pasé una mano por su cuello y la besé en los labios, ella abrió su boca y me ofreció su lengua, húmeda, caliente y puntiaguda, el beso, el primero que me daban duro mucho tiempo, mientras nos besábamos ella reanudó las manipulaciones sobre mi pija. Dejó de besarme y me preguntó:
- ¿A qué esperas para tocarme las tetas? Son tuyas tócamelas - Puse mis manos encima y aprecié su dureza.
- Nunca has tocado a una mujer. ¿Verdad? - me preguntó.
- ¿Por qué, lo hago mal? - dije yo angustiado.
- Mira hazlo así - empezó a pellizcarse suavemente los pezones mientras gemía.
- Ahora tu.
Yo empecé a seguir sus consejos y sus gemidos aumentaron, para acallarlos me ofreció otra vez su lengua, chúpame las tetas... me dijo atrayendo mi cabeza hacia ellas. Los pezones así, humm…, lámelos, así, con tu lengua, qué placer, sigue no pares. Después de dejarle sus tetas bien remojadas ella me volvió a besar y me dijo: ¿Te gusta? - Sí, mucho… - respondí yo. Ella se sentó en el borde del sofá y abrió sus piernas; Ven, arrodíllate aquí. Me arrodillé entre sus piernas y vi como los labios de su sexo estaban brillantes por la humedad. Acaríciame aquí, susurró señalando su concha. Pasé los dedos por sus húmedos labios mientras el olor a sexo me embriagaba de lo cerca que estaba, ella gemía en susurros y se contraía adelante y atrás;
- Mete tus dedos, así, muy bien, sácalos y mételos. -
Tomo mi mano guiándome y me hizo dar vueltas alrededor de su sexo mientras sus vaivenes y gemidos aumentaban en número y en volumen. De repente me quitó la mano y atrajo mi cabeza hacia el centro de sus muslos mientras me decía:
- Chúpamela, chúpame la concha, cielo, cojeme con tu lengua. -
Yo noté el sabor de su sexo en el momento en que mis labios tomaron contacto con sus labios, me sabía a gloria, quería chupársela bien, quería que ella continuara gozando como lo estaba haciendo, seguí sus instrucciones y le metí la lengua entera.
- Ah, péndejo, qué bien me lo haces… -
Ella se irguió y después se desplomó gimiendo como nunca, intenté no perder mi posición y un liquido caliente inundó mi boca, ella apretó mi cabeza entre los muslos, impidiendo que yo me apartara y obligándome a beber el néctar que salía de su concha, mientras culminaba su orgasmo. Suspiró, se arrodilló delante de mí y me dio otro largo beso, después lamió toda mi boca;
- Cariño - me dijo - me has hecho una de las mejores mamadas en mucho tiempo, y eso se merece una recompensa, ven. -
Me llevó al lado del sofá, delante de una pared que estaba cubierta por un espejo del suelo hasta el techo y se arrodilló delante de mí de forma que su boca quedo a pocos centímetros de mi choto que latía frenético dando golpes en mi vientre
- Desde que te he visto la pija he deseado tenerla en mi boca. -
Su mano estiró la piel hacia abajo, haciéndome dar un salto de dolor, que calmó con unos besos en mi prepucio, mientras acariciaba mis testículos. Cuando acabó, su lengua empezó a recorrer mi verga de arriba abajo mientras me miraba directamente a los ojos, con una expresión de sumisión tal que me hizo apartar la vista. Entonces me vi en el espejo, ella arrodillada chupándome y eso me calentó tanto que, ya sin inhibiciones de ningún tipo, le agarre la mano que tenia libre, se la chupé y la acompañe hacia el centro de mis nalgas, ella al principio no pareció entender, pero después con cara de autentica lujuria se pasó la mano por su sexo y fue a buscar la entrada de mi orto, yo noté su dedo presionando, hasta que entró la punta.
- ¿Te gusta? -
- Sí, sigue, mételo más, quiero tu dedo entero, mientras me chupas la pija. -
Ella lo fue metiendo lentamente, mientras mi pija desaparecía dentro de su boca. Empecé a moverle rítmicamente su cabeza, estaba en un sueño, el placer salía en círculos concéntricos desde mis testículos y llegaba a todas las terminaciones nerviosas de mi cuerpo, cuando su dedo se dobló hacia adentro y acarició mi próstata en círculos, una explosión de placer recorrió mi cerebro y bajó hasta mi pija que se había hinchado hasta limites desconocidos, mi leche se desparramó a borbotones en el interior de su boca, a cada contracción de mi pija, ella lamía mi prepucio desde el interior, cuando suavemente sacó el dedo de mi ano, fui temblando hasta la cama y allí me estiré boca abajo. Al cabo de un rato ella se estiró a mi lado y empezó a acariciar mi espalda.
- ¿Te ha gustado la primera mamada que te hacen? -
- Mucho, nunca había imaginado que daba tanto gusto… -
- Más que tus pajas en solitario, verdad, lo que me ha gustado es que has vencido tu timidez y me has guiado para darte mas placer, te confieso que eres el primer hombre que reconoce que le gusta tener algo metido en su culo cuando coje, y eso me ha puesto muy, muy caliente. -
- Ahora me da verguenza - dije yo.
- Eso lo arreglo yo - me dijo.
Se incorporó en la cama y me abrió las nalgas, noté el agujero de mi culo libre y por instinto flexioné mis rodillas para levantarlo, su lengua se metió en la raya del culo y empezó a subir y a bajar por ella, cada vez que pasaba por mi agujero un gemido salía de mi garganta, me notaba completamente mojado por su saliva, de repente cambió y empezó a trazar círculos con su lengua directamente en el orto.
- Es la primera vez que hago esto y me encanta chuparte el culo - me dijo
Mi pija todavía dolorida se paró otra vez queriendo más.
- Cojeme ahora mismo. Méteme la pija hasta el fondo. - Al ver mi cara de "cómo se hace" me hizo ponerme boca arriba.
- Y ahora el primer polvo.
Agarro mi pija, la puso dura empezando a flexionar sus rodillas, cuando mi prepucio rozo sus labios ella gimió, yo notaba el calor de su concha en la punta de mi pija, ella bajó suavemente hasta el fondo, flexionó las rodillas otra vez y se sentó al estilo indio encima de mí, yo sentía mis huevos apretadísimos entre mis muslos y su culo y mi pija tocando todas las paredes de su concha. Ella llevó un dedo a mi boca y yo se lo chupé llenándolo de saliva.
- Tócame las tetas, cielo, así, humedécete las manos, esta es la postura que más me gusta, mientras me cojes con tu pija, mira, me estoy haciendo una paja. Y con mi otra mano, me estoy dando placer por detrás, a mí también me gusta jugar con mi culito -
Era verdad sus dedos jugueteaban con su clítoris y en el espejo vi como su dedo estaba clavado totalmente en su culo. Sus vaivenes se hacían más rápidos, sus jadeos crecían en intensidad, mientras mis manos seguían jugando con sus tetas. Se quedó quieta de repente, y noté como su concha se cerraba y se abría alrededor de mi pija, los dos gritamos de placer en un orgasmo mutuo, acabábamos, mi pija se contraía, intentando expulsar más leche, hasta que se quedó seca, los dos estábamos quietos intentando que el placer siguiera, mientras las contracciones de su concha iban terminando. Me abrazó manteniendo la postura y me besó, me exploraba con su lengua toda mi boca, mientras notaba como mis testículos se humedecían. De repente se abrió la puerta y apareció la recepcionista, al vernos murmuró una excusa y volvió a cerrar. Nos deshicimos del abrazo y me llevó hasta el cuarto de baño, nos duchamos, y nos vestimos, ella recuperando su voz profesional me dijo:
- Haré llegar el informe a su oficina -
- Gracias - repuse yo un poco decepcionado yendo hacia la puerta. -
- Pero el viernes te quiero aquí para otra revisión - y me lanzó un beso con su mano.
Cuando salí, la recepcionista se levantó de su sitio y me abrió la puerta yo musité un adiós y cuando le miré a la cara ella estaba sonriendo.
Relatos relacionados
Bueno amigos aquí estoy para contarles el desenlace de mi loco fin de semana con mi amiga, como les dije en mi anterior relato después de que dos chicos me desvirgaran mi culito, mi amiga me dijo que su pareja quería conmigo, me lo pidió como favor y no me pude negar, nos fuimos a descansar y al siguiente día nos despertamos como a las 10, desayunamos y me dijo después de mediodía te empiezo a arreglar, Alberto vendrá como a las 3:30 ,ok, descansa ogro poco y yo voy...
21-Jul
58745
[Heterosexual] El día se prometía algo aburrido, típico día del típico encuentro familiar, donde se junta toda la familia, viendo gente que no recuerdas o que hacía años que no veías. Personalmente, esas situaciones me agobian bastante, estar sentado, rodeado de tíos, tías, abuelos, primos, primas, novios y novias de primos o primas… En fin, lo típico. Afortunadamente, de entre toda esta cantidad de gente, estaba también mi prima Ana, que tiene mi misma edad (23 años), y desde luego con la que más confianza tengo, pese a no ser prima de sangre directamente. Hemos crecido juntos y la verdad es que siempre hemos tenido muy buena relación, contándonos nuestras confidencias, problemas, preocupaciones o anécdotas. En resumen, que es muy buena chica, y quizás a la única que tenía verdaderas ganas de ver ese día.
18-Dec
32445
[Heterosexual] Este relato sucedió poco tiempo después de mi experiencia con mi prima, una chica un año menor que yo que tenía una fama increíble de ser excelente en la cama y yo quería comprobarlo, ella de baja estatura de tez blanca, cabello muy cortito castaño claro, ojos cafés, delgadita, muy coqueta, piernas muy contorneadas pero creo que lo que más me llamó la atención de ella fue su seguridad y carácter, he de decir que éramos muy similares.
21-Dec
16655
Hace tiempo que conocí a mi suegra, casi al mes de andar con la que es ahora mi mujer, recuerdo que ella iba llegando en su carro y yo llegaba a recojer a mi novia, mi sorpresa fué cuando bajó una mujer como de unos 50 años, chaparrita y muy caderona con unos jeans pegados y una blusa pegada, comenzó a bajar unas bolsas del súper así que de inmediato me presenté, y ya saben empecé a ganar puntos y le ayudé a meter las bolsas; desde ese día supe...
27-Aug
98636
Capítulo (I)- Le dije al imbécil del camarero que no quería hielo en la Coca-Cola, porque después se pone aguado; si no fuera por que está tan bueno, me quejaría; pero más vale que no le diga nada. Porque, no se sabe, yo aquí en esta maravillosa piscina del fantástico hotel Paraíso-Mar, en plena costa del sol, con una temperatura muy agradable, mientras mi marido se recorre las sucursales de todos los Bancos de la provincia para actualizar no se qué de los ordenadores, definitivamente, fue una buena idea venirme...
05-Mar
15360
Esto me ocurrió hace 6 meses cuando estuve viviendo con mi hermano en Cancún Q.Roo durante una temporada mientras terminaba mis estudios de ingeniería forestal, ya que por un intercambio académico fue testigo de una experiencia un poco perversa pero inolvidable.
Mi hermano me recibió de maravilla, me llevaba 4 años de edad, llevaba mucho tiempo de no verlo y nos dio gusto estar juntos y recordar viejos tiempos de diversión, cuando solíamos jugar, ver tele, pelear, en fin, muchas actividades que habíamos realizado años atrás. También me presento a una...
14-Dec
54033
Mi Españolito Cibernético Para mi amigo Edu , fuiste mi inspiración. Iniciando sesión?, quien iba a pensar, como esto me hace experimentar tantas sensaciones desiguales desconocidas me hace rozar los límites de la cordura, nunca pensé que alguien de tal semblante frió, apartado, lograría provocar esto en mi piel.Estas conectado Edorta solo dime hola! e iniciemos el juego? no soporto esperar doy mejor el primer paso, se que tu no lo harías jamás me imagino , sabes lo que busco o por lo...
15-Aug
13018
[Fetichismo] Soy un hombre normal en cuanto a mi vida sexual y cotidiana pero desde muy temprana edad y no se por que, he desarrollado un fetichismo obsesivo por la ropa interior de mujer. He llegado a buscar la forma de robar a una mujer sus panties y lo he logrado, incluso aun con su olor y sabor al cuerpo de la propietaria. Esta es una de esas historias.
12-Jan
34643
Mi nombre es Paulina, tengo 19 años, soy de piel blanca, cabello color negro, ojos negros y la verdad de muy bonito cuerpo, lo que les contare sucedió el 15 de septiembre del año pasado, hubo un gran festejo en mi casa, toda mi familia estaba en esta gran noche
mexicana, ya saben, antojitos, tequila, cerveza, etc...
Esa Vez mi hermano Israel llevo a su amigo Irving, el es rubio, de cuerpo atlético, ojos verdes,
total el chico es un adonis, y mi hermano no se queda atrás, pero es familiar jajaja.
Toda la...
29-Jan
85595